- ¡Cuánto te amo, Señor, fuerza mía!
El Señor es mi roca, mi amparo, mi libertador;
es mi Dios, el peñasco en que me refugio.
Es mi escudo, el poder que me salva,
¡mi más alto escondite! - En mi angustia invoqué al Señor;
clamé a mi Dios,
y él me escuchó desde su templo;
¡mi clamor llegó a sus oídos! - Tú, Señor, mantienes mi lámpara encendida;
tú, Dios mío, iluminas mis tinieblas. - El camino de Dios es perfecto;
la palabra del Señor es intachable.
Escudo es Dios a los que en él se refugian. - ¿Quién es Dios, si no el Señor?
¿Quién es la roca, si no nuestro Dios? - Tú me cubres con el escudo de tu salvación,
y con tu diestra me sostienes;
tu bondad me ha hecho prosperar.
Me has despejado el camino,
así que mis tobillos no flaquean.
Versículo de la Biblia del día
Pues, así como participamos abundantemente en los sufrimientos de Cristo, así también por medio de él tenemos abundante consuelo.Versículo de la Biblia al Azar
Gran remedio es el corazón alegre,pero el ánimo decaído seca los huesos.Siguiente versículo!Con imagen