Versículos de la Biblia sobre 'Vuestro'
- Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.
- No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí.
- Suéltame, porque todavía no he vuelto al Padre. Ve más bien a mis hermanos y diles: “Vuelvo a mi Padre, que es Padre de ustedes; a mi Dios, que es Dios de ustedes”.
- Que la gracia del Señor Jesucristo sea con su espíritu.
- Por lo tanto, manténganse despiertos, porque no saben qué día vendrá su Señor.
- Sean compasivos, así como su Padre es compasivo.
- No tengan miedo, mi rebaño pequeño, porque es la buena voluntad del Padre darles el reino.
- Por tanto, sean perfectos, así como su Padre celestial es perfecto.
- Rásguense el corazón
y no las vestiduras.
Vuélvanse al Señor su Dios,
porque él es bondadoso y compasivo,
lento para la ira y lleno de amor,
cambia de parecer y no castiga. - Cuando ustedes digan “sí”, que sea realmente sí; y, cuando digan “no”, que sea no. Cualquier cosa de más, proviene del maligno.
- Cobren ánimo y ármense de valor,
todos los que en el Señor esperan. - ¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; fueron comprados por un precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios.
- Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que quiera hacerse grande entre ustedes deberá ser su servidor, y el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de los demás.
- Sobre todo, hermanos míos, no juren ni por el cielo ni por la tierra ni por ninguna otra cosa. Que su «sí» sea «sí», y su «no», «no», para que no sean condenados.
- Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa.
- «Si se enojan, no pequen». No permitan que el enojo les dure hasta la puesta del sol, ni den cabida al diablo.
- Pero, si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre les perdonará a ustedes las suyas.
- Hasta ahora no han pedido nada en mi nombre. Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa.
- Josué replicó: —Desháganse de los dioses ajenos que todavía conservan. ¡Vuélvanse de todo corazón al Señor, Dios de Israel!
- Yo soy el Señor su Dios. Sigan mis decretos, obedezcan mis leyes y observen mis sábados como días consagrados a mí, como señal entre ustedes y yo, para que reconozcan que yo soy el Señor su Dios.
- El Señor su Dios es compasivo y misericordioso. Si ustedes se vuelven a él, jamás los abandonará.
- Porque, si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial.
- La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.
- Adora al Señor tu Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua. Yo apartaré de ustedes toda enfermedad.
- Ahora bien —afirma el Señor—,
vuélvanse a mí de todo corazón,
con ayuno, llantos y lamentos.
