El amor es paciente, es bondadoso; el amor no tiene envidia; el amor no es jactancioso, no es arrogante; no se porta indecorosamente; no busca lo suyo, no se irrita, no toma en cuenta el mal recibido. | El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor. |
Y Él respondió: Lo imposible para los hombres, es posible para Dios. | Él les dijo: Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios. |
Solo Él es mi roca y mi salvación, mi baluarte, nunca seré sacudido. | El solamente es mi roca y mi salvación; Es mi refugio, no resbalaré mucho. |
¡La Roca! Su obra es perfecta, porque todos sus caminos son justos; Dios de fidelidad y sin injusticia, justo y recto es Él. | El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto. |
Porque la palabra de la cruz es necedad para los que se pierden, pero para nosotros los salvos es poder de Dios. | Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios. |
El principio de la sabiduría es el temor del Señor, y el conocimiento del Santo es inteligencia. | El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. |
Y este es el mensaje que hemos oído de Él y que os anunciamos: Dios es luz, y en Él no hay tiniebla alguna. | Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. |
En verdad, en verdad os digo: un siervo no es mayor que su señor, ni un enviado es mayor que el que lo envió. | De cierto, de cierto os digo: El siervo no es mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió. |
Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. | Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. |
Sino que hablando la verdad en amor, crezcamos en todos los aspectos en aquel que es la cabeza, es decir, Cristo. | Sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo. |
El Señor es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El Señor es la fortaleza de mi vida; ¿de quién tendré temor? | Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme? |
¡Cuán bienaventurado es aquel cuya transgresión es perdonada, cuyo pecado es cubierto! | Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. |
Lámpara es a mis pies tu palabra, y luz para mi camino. | Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino. |
La ley del Señor es perfecta, que restaura el alma; el testimonio del Señor es seguro, que hace sabio al sencillo. | La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. |
Probad y ved que el Señor es bueno. ¡Cuán bienaventurado es el hombre que en Él se refugia! | Gustad, y ved que es bueno Jehová; Dichoso el hombre que confía en él. |
El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor. | El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. |
Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos. | Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. |
Y sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que Él existe, y que es remunerador de los que le buscan. | Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. |
Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe. | Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. |
Es necesario que Él crezca, y que yo disminuya. | Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe. |
Es mejor refugiarse en el Señor que confiar en el hombre. | Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre. |
Pero yo os digo: no juréis de ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. | Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. |
Lazo es para el hombre decir a la ligera: Es santo, y después de los votos investigar. | Lazo es al hombre hacer apresuradamente voto de consagración, Y después de hacerlo, reflexionar. |
Fiel es el que os llama, el cual también lo hará. | Fiel es el que os llama, el cual también lo hará. |
En las muchas palabras, la transgresión es inevitable, mas el que refrena sus labios es prudente. | En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente. |
Temas relacionados
Fiabilidad
Pero fiel es el...
Jesús
Mirándolos Jesús, dijo: Para...
Pecado
¿O no sabéis que...
Dios
El Señor tu Dios...
Amor
El amor es paciente...
Salvación
Y en ningún otro...