Pero yo pondré mis ojos en el Señor, esperaré en el Dios de mi salvación; mi Dios me oirá. | Mas yo volveré mis ojos a Jehová, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá. |
¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, pues he de alabarle otra vez. ¡Él es la salvación de mi ser, y mi Dios! | ¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarlo, ¡salvación mía y Dios mío! |