Busqué al Señor, y él me respondió; me libró de todos mis temores. | Busqué a Jehová, y él me oyó y me libró de todos mis temores. |
Muy bien —le contestó el Señor—. Todas sus posesiones están en tus manos, con la condición de que a él no le pongas la mano encima. Dicho esto, Satanás se retiró de la presencia del Señor. | Dijo Jehová a Satanás: —Todo lo que tiene está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él. Y salió Satanás de delante de Jehová. |
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Espero al Señor, lo espero con toda el alma; en su palabra he puesto mi esperanza. | Esperé yo en Jehová; esperó mi alma, en su palabra he esperado. |
Así que el ángel me dijo: «Esta es la palabra del Señor para Zorobabel: “No será por la fuerza ni por ningún poder, sino por mi Espíritu —dice el Señor Todopoderoso—.”» | Ésta es palabra de Jehová para Zorobabel, y dice: “No con ejército, ni con fuerza, sino con mi espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos.” |
El Señor está conmigo, y no tengo miedo; ¿qué me puede hacer un simple mortal? | Jehová está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. |
¡Refúgiense en el Señor y en su fuerza, busquen siempre su presencia! | ¡Buscad a Jehová y su poder; buscad su rostro continuamente! |
Tuya es, Señor, la salvación; ¡envía tu bendición sobre tu pueblo! Selah | La salvación es de Jehová. ¡Sobre tu pueblo sea tu bendición! Selah |
El Señor es refugio de los oprimidos; es su baluarte en momentos de angustia. | Jehová será refugio del pobre, refugio para el tiempo de angustia. |
Alaba, alma mía, al Señor; alabe todo mi ser su santo nombre. | Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. |
Tú, Señor, mantienes mi lámpara encendida; tú, Dios mío, iluminas mis tinieblas. | Tú encenderás mi lámpara; Jehová, mi Dios, alumbrará mis tinieblas. |
¡Levántate, Señor! ¡Levanta, oh Dios, tu brazo! ¡No te olvides de los indefensos! | ¡Levántate, Jehová Dios, alza tu mano! ¡No te olvides de los pobres! |
Al llegar a este punto, Job se levantó, se rasgó las vestiduras, se rasuró la cabeza, y luego se dejó caer al suelo en actitud de adoración. Entonces dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo he de partir. El Señor ha dado; el Señor ha quitado. ¡Bendito sea el nombre del Señor!» | Entonces Job se levantó, rasgó su manto y se rasuró la cabeza; luego, postrado en tierra, adoró y dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré allá. Jehová dio y Jehová quitó: ¡Bendito sea el nombre de Jehová!» |
Que tu gran amor, Señor, nos acompañe, tal como lo esperamos de ti. | ¡Sea tu misericordia, Jehová, sobre nosotros, según esperamos en ti! |
Observen mis sábados y muestren reverencia por mi santuario. Yo soy el Señor. | Guardad mis sábados y reverenciad mi santuario. Yo, Jehová. |
Este es el día en que el Señor actuó; regocijémonos y alegrémonos en él. | Éste es el día que hizo Jehová; ¡nos gozaremos y alegraremos en él! |
Por tanto, digo: «El Señor es todo lo que tengo. ¡En él esperaré!» | «Mi porción es Jehová; por tanto, en él esperaré», dice mi alma. |
Este pobre clamó, y el Señor le oyó y lo libró de todas sus angustias. | Este pobre clamó, y lo oyó Jehová y lo libró de todas sus angustias. |
Quiero alabarte, Señor, con todo el corazón, y contar todas tus maravillas. | Te alabaré, Jehová, con todo mi corazón. Contaré todas tus maravillas. |
¡Vuelve, apóstata Israel! No te miraré con ira —afirma el Señor—. No te guardaré rencor para siempre, porque soy misericordioso —afirma el Señor—. | Vuélvete, rebelde Israel, dice Jehová; no haré caer mi ira sobre ti, porque misericordioso soy yo, dice Jehová; no guardaré para siempre el enojo. |
Y ahora, Israel, ¿qué te pide el Señor tu Dios? Simplemente que le temas y andes en todos sus caminos, que lo ames y le sirvas con todo tu corazón y con toda tu alma, y que cumplas los mandamientos y los preceptos que hoy te manda cumplir, para que te vaya bien. | Ahora, pues, Israel, ¿qué pide de ti Jehová, tu Dios, sino que temas a Jehová, tu Dios, que andes en todos sus caminos, que ames y sirvas a Jehová, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad? |
Dichosos todos los que temen al Señor, los que van por sus caminos. | Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, que anda en sus caminos. |
Cantaré al Señor toda mi vida; cantaré salmos a mi Dios mientras tenga aliento. | A Jehová cantaré en mi vida; a mi Dios cantaré salmos mientras viva. |
No bien decía: «Mis pies resbalan», cuando ya tu amor, Señor, venía en mi ayuda. | Cuando yo decía: «Mi pie resbala», tu misericordia, Jehová, me sostenía. |
Pero el Señor le dijo a Samuel: —No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón. | Pero Jehová respondió a Samuel: —No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre, pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón. |
Del Señor es la tierra y todo cuanto hay en ella, el mundo y cuantos lo habitan. | De Jehová es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en él habitan. |