Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. | Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar. |
Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso y arrepiéntete. | Yo reprendo y disciplino a todos los que amo; sé, pues, celoso y arrepiéntete. |
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Yo soy Jehová, Dios de todo ser viviente, ¿acaso hay algo que sea difícil para mí? | He aquí, yo soy el Señor, el Dios de toda carne, ¿habrá algo imposible para mí? |
Jesús le dijo: —Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí. | Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí. |
Yo soy Jehová, vuestro Dios: andad en mis estatutos, guardad mis preceptos y ponedlos por obra. Santificad mis sábados, y sean por señal entre mí y vosotros, para que sepáis que yo soy Jehová, vuestro Dios. | Yo soy el Señor vuestro Dios; andad en mis estatutos, guardad mis decretos y ponedlos por obra. Y santificad mis días de reposo; y que sean una señal entre yo y vosotros, para que sepáis que yo soy el Señor vuestro Dios. |
Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. | Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. |
Y yo rogaré al Padre y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre. | Y yo rogaré al Padre, y Él os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre. |
Mas yo soy Jehová, tu Dios, desde la tierra de Egipto; no conocerás, pues, otro dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí. | Mas yo he sido el Señor tu Dios desde la tierra de Egipto; no reconocerás a otro dios fuera de mí, pues no hay más salvador que yo. |
En ti, Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás. ¡Líbrame en tu justicia! | En ti, oh Señor, me refugio; jamás sea yo avergonzado; líbrame en tu justicia. |
Les he dado a conocer tu nombre y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado esté en ellos y yo en ellos. | Yo les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer, para que el amor con que me amaste esté en ellos y yo en ellos. |
Esperé yo en Jehová; esperó mi alma, en su palabra he esperado. | Espero en el Señor; en Él espera mi alma, y en su palabra tengo mi esperanza. |
Entonces Jesús les dijo otra vez: —¡Paz a vosotros! Como me envió el Padre, así también yo os envío. | Jesús entonces les dijo otra vez: Paz a vosotros; como el Padre me ha enviado, así también yo os envío. |
Yo les doy vida eterna y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre, que me las dio, mayor que todos es, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. El Padre y yo uno somos. | Y yo les doy vida eterna y jamás perecerán, y nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano del Padre. Yo y el Padre somos uno. |
Porque yo libraba al pobre que clamaba y al huérfano que carecía de ayudador. La bendición venía sobre mí del que estaba a punto de perderse, y al corazón de la viuda yo procuraba alegría. | Porque yo libraba al pobre que clamaba, y al huérfano que no tenía quien le ayudara. Venía sobre mí la bendición del que estaba a punto de perecer, y el corazón de la viuda yo llenaba de gozo. |
¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. | ¿A quién tengo yo en los cielos, sino a ti? Y fuera de ti, nada deseo en la tierra. |
Volveos a mí, dice Jehová de los ejércitos, y yo me volveré a vosotros, dice Jehová de los ejércitos. | “Volveos a mí” —declara el Señor de los ejércitos— “y yo me volveré a vosotros” —dice el Señor de los ejércitos. |
Así como me envió el Padre viviente y yo vivo por el Padre, también el que me come vivirá por mí. | Como el Padre que vive me envió, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí. |
Yo fortaleceré la casa de Judá y guardaré la casa de José. Los haré volver, porque de ellos tendré piedad; serán como si no los hubiera desechado, porque yo soy Jehová, su Dios, y los oiré. | Fortaleceré la casa de Judá y la casa de José salvaré, y los haré volver porque me he compadecido de ellos; y serán como si no los hubiera rechazado, porque yo soy el Señor su Dios, y les responderé. |
No tengo yo mayor gozo que oír que mis hijos andan en la verdad. | No tengo mayor gozo que este: oír que mis hijos andan en la verdad. |
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo. | Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tenéis tribulación; pero confiad, yo he vencido al mundo. |
Cuando yo decía: «Mi pie resbala», tu misericordia, Jehová, me sostenía. | Si digo: Mi pie ha resbalado, tu misericordia, oh Señor, me sostendrá. |
Mas yo, con voz de alabanza, te ofreceré sacrificios; cumpliré lo que te prometí. ¡La salvación viene de Jehová! | Mas yo con voz de acción de gracias te ofreceré sacrificios. Lo que prometí, pagaré. La salvación es del Señor. |
Pero serviréis a Jehová, vuestro Dios, y él bendecirá tu pan y tus aguas. Yo apartaré de ti toda enfermedad. | Mas serviréis al Señor vuestro Dios, y Él bendecirá tu pan y tu agua; y yo quitaré las enfermedades de en medio de ti. |
Clama a mí y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces. | Clama a mí, y yo te responderé y te revelaré cosas grandes e inaccesibles, que tú no conoces. |
¿Acaso quiero yo la muerte del impío? dice Jehová, el Señor. ¿No vivirá, si se aparta de sus malos caminos? | ¿Acaso me complazco yo en la muerte del impío —declara el Señor Dios— y no en que se aparte de sus caminos y viva? |