Dios es espíritu, y los que le adoran deben adorarle en espíritu y en verdad. | Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad. |
Las mujeres estén sometidas a sus propios maridos como al Señor. Porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, siendo Él mismo el Salvador del cuerpo. | Esposas, sométanse a sus propios esposos como al Señor. Porque el esposo es cabeza de su esposa, así como Cristo es cabeza y Salvador de la iglesia, la cual es su cuerpo. |
|
Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios, y todo el que ama es nacido de Dios y conoce a Dios. | Queridos hermanos, amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios, y todo el que ama ha nacido de él y lo conoce. |
Sed misericordiosos, así como vuestro Padre es misericordioso. | Sean compasivos, así como su Padre es compasivo. |
Y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. | Y el que no toma su cruz y me sigue no es digno de mí. |
Y lo vil y despreciado del mundo ha escogido Dios; lo que no es, para anular lo que es; para que nadie se jacte delante de Dios. | También escogió Dios lo más bajo y despreciado, y lo que no es nada, para anular lo que es, a fin de que en su presencia nadie pueda jactarse. |
La salvación es del Señor. ¡Sea sobre tu pueblo tu bendición! (Selah) | Tuya es, Señor, la salvación; ¡envía tu bendición sobre tu pueblo! Selah |
El Señor es mi porción —dice mi alma— por eso en Él espero. | Por tanto, digo: «El Señor es todo lo que tengo. ¡En él esperaré!» |
La esperanza que se demora enferma el corazón, pero el deseo cumplido es árbol de vida. | La esperanza frustrada aflige al corazón; el deseo cumplido es un árbol de vida. |
El hijo sabio alegra al padre, pero el hijo necio es tristeza para su madre. | El hijo sabio es la alegría de su padre; el hijo necio es el pesar de su madre. |
La lengua apacible es árbol de vida, mas la perversidad en ella quebranta el espíritu. | La lengua que brinda alivio es árbol de vida; la lengua insidiosa deprime el espíritu. |
Es el Todopoderoso; no le podemos alcanzar; Él es grande en poder, y no pervertirá el juicio ni la abundante justicia. | El Todopoderoso no está a nuestro alcance; excelso es su poder. Grandes son su justicia y rectitud; ¡a nadie oprime! |
Este es el día que el Señor ha hecho; regocijémonos y alegrémonos en él. | Este es el día en que el Señor actuó; regocijémonos y alegrémonos en él. |
Y sobre todas estas cosas, vestíos de amor, que es el vínculo de la unidad. | Por encima de todo, vístanse de amor, que es el vínculo perfecto. |
Porque Cristo es el fin de la ley para justicia a todo aquel que cree. | De hecho, Cristo es el fin de la ley, para que todo el que cree reciba la justicia. |
Justo es el Señor en todos sus caminos, y bondadoso en todos sus hechos. | El Señor es justo en todos sus caminos y bondadoso en todas sus obras. |
El lento para la ira tiene gran prudencia, pero el que es irascible ensalza la necedad. | El que es paciente muestra gran discernimiento; el que es agresivo muestra mucha insensatez. |
Palabra fiel es esta: Que si morimos con Él, también viviremos con Él. | Este mensaje es digno de crédito: Si morimos con él, también viviremos con él. |
Pero fiel es el Señor quien os fortalecerá y protegerá del maligno. | Pero el Señor es fiel, y él los fortalecerá y los protegerá del maligno. |
Jesús entonces les respondió y dijo: Mi enseñanza no es mía, sino del que me envió. | Mi enseñanza no es mía —replicó Jesús—, sino del que me envió. |
Y habiendo tomado pan, después de haber dado gracias, lo partió, y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. | También tomó pan y, después de dar gracias, lo partió, se lo dio a ellos y dijo: —Este pan es mi cuerpo, entregado por ustedes; hagan esto en memoria de mí. |
Por tanto, sed vosotros perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto. | Por tanto, sean perfectos, así como su Padre celestial es perfecto. |
Él que oculta el odio tiene labios mentirosos, y el que esparce calumnia es un necio. | El de labios mentirosos disimula su odio, y el que propaga calumnias es un necio. |
El hombre se alegra con la respuesta adecuada, y una palabra a tiempo, ¡cuán agradable es! | Es muy grato dar la respuesta adecuada, y más grato aún cuando es oportuna. |
Bueno es el Señor, una fortaleza en el día de la angustia, y conoce a los que en Él se refugian. | Bueno es el Señor; es refugio en el día de la angustia, y protector de los que en él confían. |