Bienaventurados los pobres en espíritu, pues de ellos es el reino de los cielos. | Dichosos los pobres en espíritu, porque el reino de los cielos les pertenece. |
Los labios del necio provocan contienda, y su boca llama a los golpes. | Los labios del necio son causa de contienda; su boca incita a la riña. |
¡Cuán bienaventurados son los de camino perfecto, los que andan en la ley del Señor! | Dichosos los que van por caminos perfectos, los que andan conforme a la ley del Señor. |
Mucha paz tienen los que aman tu ley, y nada los hace tropezar. | Los que aman tu ley disfrutan de gran bienestar, y nada los hace tropezar. |
Pues si yo, el Señor y el Maestro, os lavé los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros. | Pues, si yo, el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies los unos a los otros. |
Pero Jesús dijo: Dejad a los niños, y no les impidáis que vengan a mí, porque de los que son como estos es el reino de los cielos. | Jesús dijo: «Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de los cielos es de quienes son como ellos». |
Al oír Él esto, dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los que están enfermos. | Al oír esto, Jesús les contestó: —No son los sanos los que necesitan médico, sino los enfermos. |
La esperanza de los justos es alegría, pero la expectación de los impíos perecerá. | El futuro de los justos es halagüeño; la esperanza de los malvados se desvanece. |
En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si os tenéis amor los unos a los otros. | De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros. |
Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; que como yo os he amado, así también os améis los unos a los otros. | Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros. |
Sea el matrimonio honroso en todos, y el lecho matrimonial sin mancilla, porque a los inmorales y a los adúlteros los juzgará Dios. | Tengan todos en alta estima el matrimonio y la fidelidad conyugal, porque Dios juzgará a los adúlteros y a todos los que cometen inmoralidades sexuales. |
Llevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo. | Ayúdense unos a otros a llevar sus cargas, y así cumplirán la ley de Cristo. |
Acuérdate, pues, de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y se acerquen los años en que digas: No tengo en ellos placer. | Acuérdate de tu creador en los días de tu juventud, antes que lleguen los días malos y vengan los años en que digas: «No encuentro en ellos placer alguno». |
Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban. | A eso de la medianoche, Pablo y Silas se pusieron a orar y a cantar himnos a Dios, y los otros presos los escuchaban. |
Él reserva la prosperidad para los rectos, es escudo para los que andan en integridad. | Él reserva su ayuda para la gente íntegra y protege a los de conducta intachable. |
Bueno y recto es el Señor; por tanto, Él muestra a los pecadores el camino. Dirige a los humildes en la justicia, y enseña a los humildes su camino. | Bueno y justo es el Señor; por eso les muestra a los pecadores el camino. Él dirige en la justicia a los humildes, y les enseña su camino. |
Reconociendo esto: que la ley no ha sido instituida para el justo, sino para los transgresores y rebeldes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, para los inmorales, homosexuales, secuestradores, mentirosos, los que juran en falso, y para cualquier otra cosa que es contraria a la sana doctrina, según el glorioso evangelio del Dios bendito, que me ha sido encomendado. | Tengamos en cuenta que la ley no se ha instituido para los justos, sino para los desobedientes y rebeldes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos. La ley es para los que maltratan a sus propios padres, para los asesinos, para los adúlteros y los homosexuales, para los traficantes de esclavos, los embusteros y los que juran en falso. En fin, la ley es para todo lo que está en contra de la sana doctrina enseñada por el glorioso evangelio que el Dios bendito me ha confiado. |
Cualquiera, pues, que anule uno solo de estos mandamientos, aun de los más pequeños, y así lo enseñe a otros, será llamado muy pequeño en el reino de los cielos; pero cualquiera que los guarde y los enseñe, este será llamado grande en el reino de los cielos. | Todo el que infrinja uno solo de estos mandamientos, por pequeño que sea, y enseñe a otros a hacer lo mismo, será considerado el más pequeño en el reino de los cielos; pero el que los practique y enseñe será considerado grande en el reino de los cielos. |
Hay engaño en el corazón de los que traman el mal, y gozo en los consejeros de paz. | En los que fraguan el mal habita el engaño, pero hay gozo para los que promueven la paz. |
Los leoncillos pasan necesidad y tienen hambre, mas los que buscan al Señor no carecerán de bien alguno. | Los leoncillos se debilitan y tienen hambre, pero a los que buscan al Señor nada les falta. |
El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para anunciar el evangelio a los pobres. Me ha enviado para proclamar libertad a los cautivos, y la recuperación de la vista a los ciegos; para poner en libertad a los oprimidos. | El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos. |
Por tanto, aceptaos los unos a los otros, como también Cristo nos aceptó para gloria de Dios. | Por tanto, acéptense mutuamente, así como Cristo los aceptó a ustedes para gloria de Dios. |
En ti pondrán su confianza los que conocen tu nombre, porque tú, oh Señor, no abandonas a los que te buscan. | En ti confían los que conocen tu nombre, porque tú, Señor, jamás abandonas a los que te buscan. |
Mas la misericordia del Señor es desde la eternidad hasta la eternidad, para los que le temen, y su justicia para los hijos de los hijos, para los que guardan su pacto y se acuerdan de sus preceptos para cumplirlos. | Pero el amor del Señor es eterno y siempre está con los que le temen; su justicia está con los hijos de sus hijos, con los que cumplen su pacto y se acuerdan de sus preceptos para ponerlos por obra. |
Por tanto, al Rey eterno, inmortal, invisible, único Dios, a Él sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén. | Por tanto, al Rey eterno, inmortal, invisible, al único Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén. |
Versículo de la Biblia del día
Pero aun si sufrís por causa de la justicia, dichosos sois. Y no os amedrentéis por temor a ellos ni os turbéis.Versículo de la Biblia al Azar
El Señor tu Dios está en medio de ti,guerrero victorioso;
se gozará en ti con alegría,
en su amor guardará silencio,
se regocijará por ti con cantos de júbilo.Siguiente versículo!Con imagen