Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. | Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. |
El que salga vencedor se vestirá de blanco. Jamás borraré su nombre del libro de la vida, sino que reconoceré su nombre delante de mi Padre y delante de sus ángeles. | El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles. |
Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. | Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. |
Den gracias al Señor, invoquen su nombre; den a conocer sus obras entre las naciones. | Alabad a Jehová, invocad su nombre; Dad a conocer sus obras en los pueblos. |
Y él nos ha dado este mandamiento: el que ama a Dios, ame también a su hermano. | Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano. |
Por su propia voluntad nos hizo nacer mediante la palabra de verdad, para que fuéramos como los primeros y mejores frutos de su creación. | El, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas. |
Por la palabra del Señor fueron creados los cielos, y por el soplo de su boca, las estrellas. | Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos, Y todo el ejército de ellos por el aliento de su boca. |
Su divino poder, al darnos el conocimiento de aquel que nos llamó por su propia gloria y excelencia, nos ha concedido todas las cosas que necesitamos para vivir como Dios manda. | Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia. |
Pero el Señor cuida de los que le temen, de los que esperan en su gran amor. | He aquí el ojo de Jehová sobre los que le temen, Sobre los que esperan en su misericordia. |
Aunque uno se aparte del temor al Todopoderoso, el amigo no le niega su lealtad. | El atribulado es consolado por su compañero; Aun aquel que abandona el temor del Omnipotente. |
Al necio no le complace el discernimiento; tan solo hace alarde de su propia opinión. | No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra. |
Y el testimonio es este: que Dios nos ha dado vida eterna, y esa vida está en su Hijo. | Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. |
Pero al principio de la creación Dios “los hizo hombre y mujer”. “Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser un solo cuerpo”. Así que ya no son dos, sino uno solo. Por tanto, lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre. | Pero al principio de la creación, varón y hembra los hizo Dios. Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino uno. Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. |
El necio desdeña la corrección de su padre; el que la acepta demuestra prudencia. | El necio menosprecia el consejo de su padre; Mas el que guarda la corrección vendrá a ser prudente. |
Porque el Señor se complace en su pueblo; a los humildes concede el honor de la victoria. | Porque Jehová tiene contentamiento en su pueblo; Hermoseará a los humildes con la salvación. |
Y ahora, ¿qué esperas? Levántate, bautízate y lávate de tus pecados, invocando su nombre. | Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre. |
El Todopoderoso no está a nuestro alcance; excelso es su poder. Grandes son su justicia y rectitud; ¡a nadie oprime! | El es Todopoderoso, al cual no alcanzamos, grande en poder; Y en juicio y en multitud de justicia no afligirá. |
No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos. | No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. |
El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor. | El corazón del hombre piensa su camino; Mas Jehová endereza sus pasos. |
Que nadie busque sus propios intereses, sino los del prójimo. | Ninguno busque su propio bien, sino el del otro. |
El que cumple el mandamiento cumple consigo mismo; el que descuida su conducta morirá. | El que guarda el mandamiento guarda su alma; Mas el que menosprecia sus caminos morirá. |
Con la boca el impío destruye a su prójimo, pero los justos se libran por el conocimiento. | El hipócrita con la boca daña a su prójimo; Mas los justos son librados con la sabiduría. |
Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. | Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. |
Instruye al niño en el camino correcto, y aun en su vejez no lo abandonará. | Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él. |
Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él? | Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? |
Versículo de la Biblia del día
Solo él es mi roca y mi salvación;él es mi protector
y no habré de caer.