Vuelve, y di a Ezequías, príncipe de mi pueblo: Así dice Jehová, el Dios de David tu padre: Yo he oído tu oración, y he visto tus lágrimas; he aquí que yo te sano; al tercer día subirás a la casa de Jehová. | Vuelve, y dile a Ezequías, príncipe de mi pueblo: “Así dice Jehová, el Dios de David, tu padre: He oído tu oración, he visto tus lágrimas y voy a sanarte: dentro de tres días subirás a la casa de Jehová.” |
Porque tú nos probaste, oh Dios; Nos ensayaste como se afina la plata. | Porque tú, Dios, nos probaste; nos purificaste como se purifica la plata. |
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Cuando yo decía: Mi pie resbala, Tu misericordia, oh Jehová, me sustentaba. | Cuando yo decía: «Mi pie resbala», tu misericordia, Jehová, me sostenía. |
Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo; Sálvame por tu misericordia. | Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo; ¡sálvame por tu misericordia! |
He aquí, Dios es el que me ayuda; El Señor está con los que sostienen mi vida. | Dios es el que me ayuda; el Señor está con los que sostienen mi vida. |
Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma; que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad? | Ahora, pues, Israel, ¿qué pide de ti Jehová, tu Dios, sino que temas a Jehová, tu Dios, que andes en todos sus caminos, que ames y sirvas a Jehová, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad? |
No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. | No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. |
El solamente es mi roca y mi salvación; Es mi refugio, no resbalaré mucho. | Solamente él es mi roca y mi salvación; es mi refugio, no resbalaré mucho. |
Pero de día mandará Jehová su misericordia, Y de noche su cántico estará conmigo, Y mi oración al Dios de mi vida. | Pero de día mandará Jehová su misericordia y de noche su cántico estará conmigo, y mi oración al Dios de mi vida. |
Me diste asimismo el escudo de tu salvación; Tu diestra me sustentó, Y tu benignidad me ha engrandecido. Ensanchaste mis pasos debajo de mí, Y mis pies no han resbalado. | Me diste asimismo el escudo de tu salvación; tu diestra me sustentó y tu benignidad me ha engrandecido. Ensanchaste mis pasos debajo de mí y mis pies no han resbalado. |
Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. | Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. |
Mas yo en tu misericordia he confiado; Mi corazón se alegrará en tu salvación. Cantaré a Jehová, Porque me ha hecho bien. | Mas yo en tu misericordia he confiado; mi corazón se alegrará en tu salvación. Cantaré a Jehová porque me ha hecho bien. |
Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan. | Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan. |
Hijo mío, si tu corazón fuere sabio, También a mí se me alegrará el corazón. | Hijo mío, si tu corazón es sabio, también a mí se me alegrará el corazón. |
Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones. | Conoce, pues, que Jehová, tu Dios, es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta por mil generaciones. |
Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios, Y sobre toda la tierra sea enaltecida tu gloria. | Exaltado seas, Dios, sobre los cielos, y sobre toda la tierra sea enaltecida tu gloria. |
Ayúdanos, oh Dios de nuestra salvación, por la gloria de tu nombre; Y líbranos, y perdona nuestros pecados por amor de tu nombre. | ¡Ayúdanos, Dios de nuestra salvación, por la gloria de tu nombre! ¡Líbranos y perdona nuestros pecados por amor de tu nombre! |
Jehová es mi fortaleza y mi escudo; En él confió mi corazón, y fui ayudado, Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi cántico le alabaré. | Jehová es mi fortaleza y mi escudo; en él confió mi corazón y fui ayudado, por lo que se gozó mi corazón. Con mi cántico lo alabaré. |
Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. | Si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. |
He aquí que yo soy Jehová, Dios de toda carne; ¿habrá algo que sea difícil para mí? | Yo soy Jehová, Dios de todo ser viviente, ¿acaso hay algo que sea difícil para mí? |
Pues aún no está la palabra en mi lengua, Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda. | Pues aún no está la palabra en mi lengua y ya tú, Jehová, la sabes toda. |
Ordena mis pasos con tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí. | Ordena mis pasos con tu palabra y ninguna maldad se enseñoree de mí. |
Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas sobre todo; en tu mano está la fuerza y el poder, y en tu mano el hacer grande y el dar poder a todos. | Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas sobre todo; en tu mano está la fuerza y el poder, y en tu mano el dar grandeza y poder a todos. |
A él clamé con mi boca, Y fue exaltado con mi lengua. | A él clamé con mi boca y fue exaltado con mi lengua. |
El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. | El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. |