Cuando siento miedo, pongo en ti mi confianza. | En el día que temo, Yo en ti confío. |
Es mejor refugiarse en el Señor que confiar en el hombre. | Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre. |
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Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración. | Gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración. |
No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí. | No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. |
¿Cómo sabemos que permanecemos en él, y que él permanece en nosotros? Porque nos ha dado de su Espíritu. | En esto conocemos que permanecemos en él, y él en nosotros, en que nos ha dado de su Espíritu. |
El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él. | El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él. |
Se mantenían firmes en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en el partimiento del pan y en la oración. | Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. |
Al de carácter firme lo guardarás en perfecta paz, porque en ti confía. | Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. |
Concentren su atención en las cosas de arriba, no en las de la tierra. | Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. |
El Señor es justo en todos sus caminos y bondadoso en todas sus obras. | Justo es Jehová en todos sus caminos, Y misericordioso en todas sus obras. |
El que obedece sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. ¿Cómo sabemos que él permanece en nosotros? Por el Espíritu que nos dio. | Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado. |
Si es posible, y en cuanto dependa de ustedes, vivan en paz con todos. | Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. |
Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad. | Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren. |
Confía en el Señor y haz el bien; establécete en la tierra y mantente fiel. | Confía en Jehová, y haz el bien; Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. |
Te daré las llaves del reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo. | Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos. |
Permanezca en ustedes lo que han oído desde el principio, y así ustedes permanecerán también en el Hijo y en el Padre. | Lo que habéis oído desde el principio, permanezca en vosotros. Si lo que habéis oído desde el principio permanece en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre. |
Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los que gozan de su buena voluntad. | !!Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres! |
En ti, Señor, busco refugio; jamás permitas que me avergüencen; en tu justicia, líbrame. | En ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás; Líbrame en tu justicia. |
¿A quién tengo en el cielo sino a ti? Si estoy contigo, ya nada quiero en la tierra. | ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. |
Porque donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. | Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. |
Pues así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos volverán a vivir. | Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. |
Si alguien reconoce que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios. | Todo aquel que confiese que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios. |
En todo tiempo ama el amigo; para ayudar en la adversidad nació el hermano. | En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia. |
¿Por qué te fijas en la astilla que tiene tu hermano en el ojo, y no le das importancia a la viga que está en el tuyo? | ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? |
Estos confían en sus carros de guerra, aquellos confían en sus corceles, pero nosotros confiamos en el nombre del Señor nuestro Dios. | Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; Mas nosotros del nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria. |