Versículos de la Biblia sobre 'Sal y la luz'
Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida. | Una vez más Jesús se dirigió a la gente, y les dijo: —Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida. |
Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. | Y dijo Dios: «¡Que exista la luz!» Y la luz llegó a existir. |
Porque no se apoderaron de la tierra por su espada, Ni su brazo los libró; Sino tu diestra, y tu brazo, y la luz de tu rostro, Porque te complaciste en ellos. | Porque no fue su espada la que conquistó la tierra, ni fue su brazo el que les dio la victoria: fue tu brazo, tu mano derecha; fue la luz de tu rostro, porque tú los amabas. |
La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella. | Esta luz resplandece en las tinieblas, y las tinieblas no han podido extinguirla. |
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres. | Ustedes son la sal de la tierra. Pero, si la sal se vuelve insípida, ¿cómo recobrará su sabor? Ya no sirve para nada, sino para que la gente la deseche y la pisotee. |
Sea la luz de Jehová nuestro Dios sobre nosotros, Y la obra de nuestras manos confirma sobre nosotros; Sí, la obra de nuestras manos confirma. | Que el favor del Señor nuestro Dios esté sobre nosotros. Confirma en nosotros la obra de nuestras manos; sí, confirma la obra de nuestras manos. |
El revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz. | Él revela lo profundo y lo escondido, y sabe lo que se oculta en las sombras. ¡En él habita la luz! |
Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado. | Pero, si vivimos en la luz, así como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesucristo nos limpia de todo pecado. |
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. | Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad en lo alto de una colina no puede esconderse. |
Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti. | ¡Levántate y resplandece, que tu luz ha llegado! ¡La gloria del Señor brilla sobre ti! |
Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. | En cambio, el que practica la verdad se acerca a la luz, para que se vea claramente que ha hecho sus obras en obediencia a Dios. |
Nadie que enciende una luz la cubre con una vasija, ni la pone debajo de la cama, sino que la pone en un candelero para que los que entran vean la luz. | Nadie enciende una lámpara para después cubrirla con una vasija o ponerla debajo de la cama, sino para ponerla en una repisa, a fin de que los que entren tengan luz. |
No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? | No formen yunta con los incrédulos. ¿Qué tienen en común la justicia y la maldad? ¿O qué comunión puede tener la luz con la oscuridad? |
Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará. Exhibirá tu justicia como la luz, Y tu derecho como el mediodía. | Encomienda al Señor tu camino; confía en él, y él actuará. Hará que tu justicia resplandezca como el alba; tu justa causa, como el sol de mediodía. |
Por tanto, todo lo que habéis dicho en tinieblas, a la luz se oirá; y lo que habéis hablado al oído en los aposentos, se proclamará en las azoteas. | Así que todo lo que ustedes han dicho en la oscuridad se dará a conocer a plena luz, y lo que han susurrado a puerta cerrada se proclamará desde las azoteas. |
Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz. | Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz. |
El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. | El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán. |
Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme? | El Señor es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? El Señor es el baluarte de mi vida; ¿quién podrá amedrentarme? |
Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. | Busquen la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. |
Pero corra el juicio como las aguas, y la justicia como impetuoso arroyo. | ¡Pero que fluya el derecho como las aguas, y la justicia como arroyo inagotable! |
Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel. | Por eso, el Señor mismo les dará una señal: La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y lo llamará Emanuel. |
Y él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan. | Dichosos más bien —contestó Jesús— los que oyen la palabra de Dios y la obedecen. |
Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. | Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. |
Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios. | Tomen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios. |
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. | Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí. |
Versículo de la Biblia del día
Libra mi alma, oh Jehová, del labio mentiroso,Y de la lengua fraudulenta.