Pero tú, Señor, me rodeas cual escudo; tú eres mi gloria; ¡tú mantienes en alto mi cabeza! | Mas tú, oh Señor, eres escudo en derredor mío, mi gloria, y el que levanta mi cabeza. |
Tuya es, Señor, la salvación; ¡envía tu bendición sobre tu pueblo! Selah | La salvación es del Señor. ¡Sea sobre tu pueblo tu bendición! (Selah) |