
Sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna, en los cielos.
Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos.
Porque sabemos que si la tienda terrenal que es nuestra morada, es destruida, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna en los cielos.
Temas relacionados
Cuerpo
¿O ignoráis que vuestro...
Vida
Jehová te guardará de...
Muerte
Le dijo Jesús: —Yo...
Cielo
El Señor mismo, con...
Vida eterna
Yo les doy vida...
Amor
El amor es sufrido...
Versículo de la Biblia del día
Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: —Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Habiendo dicho esto, expiró.Versículo de la Biblia al Azar
Te haré entender y te enseñaré el camino en que debes andar;sobre ti fijaré mis ojos.Siguiente versículo!Con imagen