La respuesta amable calma el enojo,
pero la agresiva echa leña al fuego.
pero la agresiva echa leña al fuego.
La blanda respuesta quita la ira;
Mas la palabra áspera hace subir el furor.
Mas la palabra áspera hace subir el furor.
La respuesta suave aplaca la ira,
pero la palabra áspera hace subir el furor.
pero la palabra áspera hace subir el furor.
La suave respuesta aparta el furor,
mas la palabra hiriente hace subir la ira.
mas la palabra hiriente hace subir la ira.