- Por lo cual, todo lo que habéis dicho en la oscuridad se oirá a la luz, y lo que habéis susurrado en las habitaciones interiores, será proclamado desde las azoteas.
- Muchas son las aflicciones del justo,
pero de todas ellas lo libra el Señor. - Te alabaré entre los pueblos, Señor;
te cantaré alabanzas entre las naciones. - El odio suscita rencillas,
pero el amor cubre todas las transgresiones. - Y sucedió que por haber las parteras temido a Dios, Él prosperó sus familias.
- Pongo mi arco en las nubes y será por señal del pacto entre yo y la tierra.
- Me he gozado en el camino de tus testimonios,
más que en todas las riquezas. - Y Moisés estuvo allí con el Señor cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan ni bebió agua. Y escribió en las tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos.
- Jesús le dijo: «¿Cómo si tú puedes?». Todas las cosas son posibles para el que cree.
- Porque toda casa es hecha por alguno, pero el que hace todas las cosas es Dios.
- Dios es nuestro refugio y fortaleza,
nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. - Mujer hacendosa, ¿quién la hallará?
Su valor supera en mucho al de las joyas. - Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No sois vosotros de mucho más valor que ellas?
- Como el ciervo anhela las corrientes de agua,
así suspira por ti, oh Dios, el alma mía. - Entonces, después de ayunar, orar y haber impuesto las manos sobre ellos, los enviaron.
- De nada sirven las riquezas el día de la ira,
pero la justicia libra de la muerte. - Más vale el buen nombre que las muchas riquezas,
y el favor que la plata y el oro. - Y aquel en quien se sembró la semilla entre espinos, este es el que oye la palabra, mas las preocupaciones del mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se queda sin fruto.
- Panal de miel son las palabras agradables,
dulces al alma y salud para los huesos. - Él que anda en chismes revela secretos,
pero el de espíritu leal oculta las cosas. - El que edifica en los cielos sus altos aposentos,
y sobre la tierra ha establecido su bóveda;
el que llama a las aguas del mar
y las derrama sobre la faz de la tierra:
el Señor es su nombre. - Porque de Él, por Él y para Él son todas las cosas. A Él sea la gloria para siempre. Amén.
- Gloria a Dios en las alturas,
y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace. - Todas las cosas fueron hechas por medio de Él, y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
- Es honra para el hombre eludir las contiendas,
pero cualquier necio se enredará en ellas.
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