Hay camino que al hombre le parece derecho, pero al final, es camino de muerte. | Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte. |
El hombre perverso provoca contiendas, y el chismoso separa a los mejores amigos. | El hombre perverso levanta contienda, Y el chismoso aparta a los mejores amigos. |
Él que anda en chismes revela secretos, pero el de espíritu leal oculta las cosas. | El que anda en chismes descubre el secreto; Mas el de espíritu fiel lo guarda todo. |
Muerte y vida están en poder de la lengua, y los que la aman comerán su fruto. | La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos. |
Como el agua refleja el rostro, así el corazón del hombre refleja al hombre. | Como en el agua el rostro corresponde al rostro, Así el corazón del hombre al del hombre. |
Miren tus ojos hacia adelante, y que tu mirada se fíje en lo que está frente a ti. | Tus ojos miren lo recto, Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante. |
El hombre de muchos amigos se arruina, pero hay amigo más unido que un hermano. | El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; Y amigo hay más unido que un hermano. |
El enojo del necio se conoce al instante, mas el prudente oculta la deshonra. | El necio al punto da a conocer su ira; Mas el que no hace caso de la injuria es prudente. |
Porque el Señor da sabiduría, de su boca vienen el conocimiento y la inteligencia. | Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. |
El corazón alegre es buena medicina, pero el espíritu quebrantado seca los huesos. | El corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos. |
Sin consulta, los planes se frustran, pero con muchos consejeros, triunfan. | Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; Mas en la multitud de consejeros se afirman. |
Mujer hacendosa, ¿quién la hallará? Su valor supera en mucho al de las joyas. | Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. |
El temor del Señor es instrucción de sabiduría, y antes de la gloria está la humildad. | El temor de Jehová es enseñanza de sabiduría; Y a la honra precede la humildad. |
Abre tu boca, juzga con justicia, y defiende los derechos del afligido y del necesitado. | Abre tu boca, juzga con justicia, Y defiende la causa del pobre y del menesteroso. |
La esperanza de los justos es alegría, pero la expectación de los impíos perecerá. | La esperanza de los justos es alegría; Mas la esperanza de los impíos perecerá. |
Todo camino del hombre es recto ante sus ojos, pero el Señor sondea los corazones. | Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; Pero Jehová pesa los corazones. |
Corona de los ancianos son los hijos de los hijos, y la gloria de los hijos son sus padres. | Corona de los viejos son los nietos, Y la honra de los hijos, sus padres. |
La recompensa de la humildad y el temor del Señor son la riqueza, el honor y la vida. | Riquezas, honra y vida Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová. |
Lo que es deseable en un hombre es su bondad, y es mejor ser pobre que mentiroso. | Contentamiento es a los hombres hacer misericordia; Pero mejor es el pobre que el mentiroso. |
De nada sirven las riquezas el día de la ira, pero la justicia libra de la muerte. | No aprovecharán las riquezas en el día de la ira; Mas la justicia librará de muerte. |
Él que anda con sabios será sabio, mas el compañero de los necios sufrirá daño. | El que anda con sabios, sabio será; Mas el que se junta con necios será quebrantado. |
El que adquiere cordura ama su alma; el que guarda la prudencia hallará el bien. | El que posee entendimiento ama su alma; El que guarda la inteligencia hallará el bien. |
La dádiva del hombre le abre camino y lo lleva ante la presencia de los grandes. | La dádiva del hombre le ensancha el camino Y le lleva delante de los grandes. |
Panal de miel son las palabras agradables, dulces al alma y salud para los huesos. | Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y medicina para los huesos. |
Por el camino de la sabiduría te he conducido, por sendas de rectitud te he guiado. | Por el camino de la sabiduría te he encaminado, Y por veredas derechas te he hecho andar. |
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