El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él. | El que tiene mis mandamientos y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me manifestaré a él. |
Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. | Yo soy la puerta: el que por mí entre será salvo; entrará y saldrá, y hallará pastos. |
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Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. | La palabra de Dios es viva, eficaz y más cortante que toda espada de dos filos: penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. |
Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. | Los bendijo Dios y les dijo: «Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra y sometedla; ejerced potestad sobre los peces del mar, las aves de los cielos y todas las bestias que se mueven sobre la tierra.» |
Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres. | Y les dijo: —Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres. |
Busqué a Jehová, y él me oyó, Y me libró de todos mis temores. | Busqué a Jehová, y él me oyó y me libró de todos mis temores. |
Envió su palabra, y los sanó, Y los libró de su ruina. | Envió su palabra y los sanó; los libró de su ruina. |
Este pobre clamó, y le oyó Jehová, Y lo libró de todas sus angustias. | Este pobre clamó, y lo oyó Jehová y lo libró de todas sus angustias. |
Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. | Codiciáis y no tenéis; matáis y ardéis de envidia y nada podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. |
Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy. | Y si tuviera profecía, y entendiera todos los misterios y todo conocimiento, y si tuviera toda la fe, de tal manera que trasladara los montes, y no tengo amor, nada soy. |
Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne. | Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y los dos serán una sola carne. |
Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra. | Pondré dentro de vosotros mi espíritu, y haré que andéis en mis estatutos y que guardéis mis preceptos y los pongáis por obra. |
Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. | Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor, y el que permanece en amor permanece en Dios y Dios en él. |
Entonces entenderás justicia, juicio Y equidad, y todo buen camino. | Entonces comprenderás qué es justicia, juicio y equidad, y todo buen camino. |
Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo. | Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo. |
Antes que naciesen los montes Y formases la tierra y el mundo, Desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios. | Antes que nacieran los montes y formaras la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios. |
De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan. | De Jehová es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en él habitan. |
Y Juan estaba vestido de pelo de camello, y tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos; y su comida era langostas y miel silvestre. | Juan estaba vestido de pelo de camello, tenía un cinto de cuero alrededor de su cintura, y su comida era langostas y miel silvestre. |
Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno. | Examíname, Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos. Ve si hay en mí camino de perversidad y guíame en el camino eterno. |
Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. | Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. |
Y llamando a la gente y a sus discípulos, les dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. | Y llamando a la gente y a sus discípulos, les dijo: —Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. |
Salí del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre. | Salí del Padre y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo y regreso al Padre. |
Y cómo nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas. | Y cómo nada que fuera útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas. |
Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. | Rasgad vuestro corazón y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová, vuestro Dios; porque es misericordioso y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y se duele del castigo. |
Ayunamos, pues, y pedimos a nuestro Dios sobre esto, y él nos fue propicio. | Ayunamos, pues, y pedimos a nuestro Dios sobre esto, y él nos fue propicio. |