Incluso la oración le es abominable al que aparta su oído para no escuchar la Ley. | El que aparta su oído para no oír la ley, Su oración también es abominable. |
El que oculta sus pecados no prosperará, pero el que los confiesa y se aparta de ellos alcanzará misericordia. | El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. |
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El necio da rienda suelta a toda su ira, pero el sabio, al fin, la apacigua. | El necio da rienda suelta a toda su ira, Mas el sabio al fin la sosiega. |
La soberbia del hombre le acarrea humillación, pero al humilde de espíritu lo sustenta la honra. | La soberbia del hombre le abate; Pero al humilde de espíritu sustenta la honra. |
El temor del hombre le pone trampas; el que confía en Jehová está a salvo. | El temor del hombre pondrá lazo; Mas el que confía en Jehová será exaltado. |
Toda palabra de Dios es limpia; él es escudo para los que en él esperan. | Toda palabra de Dios es limpia; El es escudo a los que en él esperan. |
Vanidad y mentira aparta de mí, y no me des pobreza ni riquezas, sino susténtame con el pan necesario. | Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; No me des pobreza ni riquezas; Manténme del pan necesario. |
Abre tu boca en favor del mudo en el juicio de todos los desvalidos. | Abre tu boca por el mudo En el juicio de todos los desvalidos. |
Abre tu boca, juzga con justicia y defiende la causa del pobre y del menesteroso. | Abre tu boca, juzga con justicia, Y defiende la causa del pobre y del menesteroso. |
Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Su valor sobrepasa largamente al de las piedras preciosas. | Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. |
Engañosa es la gracia y vana la hermosura, pero la mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. | Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. |
El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. | El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. |
¡Volveos a mi reprensión!, pues ciertamente yo derramaré mi espíritu sobre vosotros y os haré saber mis palabras. | Volveos a mi reprensión; He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, Y os haré saber mis palabras. |
Porque Jehová da la sabiduría y de su boca proceden el conocimiento y la inteligencia. | Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia. |
Él provee de sana sabiduría a los rectos: es escudo para los que caminan rectamente. | El provee de sana sabiduría a los rectos; Es escudo a los que caminan rectamente. |
Él es quien guarda las veredas del juicio y preserva el camino de sus santos. | Es el que guarda las veredas del juicio, Y preserva el camino de sus santos. |
Entonces comprenderás qué es justicia, juicio y equidad, y todo buen camino. | Entonces entenderás justicia, juicio Y equidad, y todo buen camino. |
Hijo mío, no te olvides de mi Ley, y que tu corazón guarde mis mandamientos, porque muchos días y años de vida y de paz te aumentarán. | Hijo mío, no te olvides de mi ley, Y tu corazón guarde mis mandamientos; Porque largura de días y años de vida Y paz te aumentarán. |
Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad: átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón y hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres. | Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Atalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu corazón; Y hallarás gracia y buena opinión Ante los ojos de Dios y de los hombres. |
Confía en Jehová con todo tu corazón y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos y él hará derechas tus veredas. | Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas. |
No seas sabio en tu propia opinión, sino teme a Jehová y apártate del mal, porque esto será medicina para tus músculos y refrigerio para tus huesos. | No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal; Porque será medicina a tu cuerpo, Y refrigerio para tus huesos. |
Honra a Jehová con tus bienes y con las primicias de todos tus frutos. | Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos. |
No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, no te canses de que él te corrija, porque Jehová al que ama castiga, como el padre al hijo a quien quiere. | No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, Ni te fatigues de su corrección; Porque Jehová al que ama castiga, Como el padre al hijo a quien quiere. |
¡Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría y obtiene la inteligencia! | Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, Y que obtiene la inteligencia. |
Si tienes poder para hacer el bien, no te rehúses a hacérselo a quien lo necesite. | No te niegues a hacer el bien a quien es debido, Cuando tuvieres poder para hacerlo. |