
Ayunamos, pues, y pedimos a nuestro Dios sobre esto, y él nos fue propicio. | Así que ayunamos y oramos a nuestro Dios pidiéndole su protección, y él nos escuchó. |
Versículo de la Biblia del día
En tu mano están mis tiempos;Líbrame de la mano de mis enemigos
y de mis perseguidores.