Hasta que se derrame sobre nosotros el Espíritu desde lo alto, el desierto se convierta en campo fértil y el campo fértil sea considerado como bosque. | Hasta que sobre nosotros sea derramado el Espíritu de lo alto, y el desierto se convierta en campo fértil, y el campo fértil sea estimado por bosque. |
Temas relacionados
Espíritu
Ahora bien, el Señor...
Pentecostés
Cuando llegó el día...
Amor
El amor es paciente...
Esperanza
«Porque yo sé los...
Fe
Por eso os digo...
Familia
Y estas palabras que...