No debemos, pues, dormirnos como los demás, sino mantenernos alerta y en nuestro sano juicio. | Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios. |
Por eso, anímense y edifíquense unos a otros, tal como lo vienen haciendo. | Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis. |
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Asegúrense de que nadie pague mal por mal; más bien, esfuércense siempre por hacer el bien, no solo entre ustedes, sino a todos. | Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos. |
Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús. | Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. |
Sométanlo todo a prueba, aférrense a lo bueno, eviten toda clase de mal. | Examinadlo todo; retened lo bueno. Absteneos de toda especie de mal. |
El que los llama es fiel, y así lo hará. | Fiel es el que os llama, el cual también lo hará. |