No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra.
No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.
No os engañéis; Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará.
No os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará.