DailyVerses.netTemasVersículo al AzarRegistrar

Pues (2/4)

El pecado no se enseñoreará de vosotros, pues no estáis bajo la Ley, sino bajo la gracia.Así el pecado no tendrá dominio sobre ustedes, porque ya no están bajo la ley, sino bajo la gracia.
Guardarás, pues, los mandamientos de Jehová, tu Dios, andando en sus caminos y temiéndolo.Cumple los mandamientos del Señor tu Dios; témelo y sigue sus caminos.
Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.Me propuse más bien, estando entre ustedes, no saber de cosa alguna, excepto de Jesucristo, y de este crucificado.
Porque yo no quiero la muerte del que muere, dice Jehová, el Señor. ¡Convertíos, pues, y viviréis!Yo no quiero la muerte de nadie. ¡Conviértanse, y vivirán! Lo afirma el Señor omnipotente.
Todo aquel que comete pecado, infringe también la Ley, pues el pecado es infracción de la Ley.Todo el que comete pecado quebranta la ley; de hecho, el pecado es transgresión de la ley.
No os engañéis; Dios no puede ser burlado, pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará.No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra.
Y tuya, Señor, es la misericordia, pues tú pagas a cada uno conforme a su obra.Que tú, Señor, eres todo amor; que tú pagarás a cada uno según lo que merezcan sus obras.
Pues esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.Pues los sufrimientos ligeros y efímeros que ahora padecemos producen una gloria eterna que vale muchísimo más que todo sufrimiento.
Aunque andamos en la carne, no militamos según la carne.Pues aunque vivimos en el mundo, no libramos batallas como lo hace el mundo.
Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.
Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.Por tanto, sean perfectos, así como su Padre celestial es perfecto.
Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?Pues, si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan!
Si, pues, coméis o bebéis o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.En conclusión, ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios.
Porque el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente y de la venidera.Pues aunque el ejercicio físico trae algún provecho, la piedad es útil para todo, ya que incluye una promesa no solo para la vida presente, sino también para la venidera.
Por eso eres inexcusable, hombre, tú que juzgas, quienquiera que seas, porque al juzgar a otro, te condenas a ti mismo, pues tú, que juzgas, haces lo mismo.Por tanto, no tienes excusa tú, quienquiera que seas, cuando juzgas a los demás, pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo, ya que practicas las mismas cosas.
¿Qué, pues? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la Ley, sino bajo la gracia? ¡De ninguna manera!Entonces, ¿qué? ¿Vamos a pecar porque no estamos ya bajo la ley, sino bajo la gracia? ¡De ninguna manera!
Pues habéis renacido, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre.Pues ustedes han nacido de nuevo, no de simiente perecedera, sino de simiente imperecedera, mediante la palabra de Dios que vive y permanece.
Habéis, pues, de serme santos, porque yo, Jehová, soy santo, y os he apartado de entre los pueblos para que seáis míos.Sean ustedes santos, porque yo, el Señor, soy santo, y los he distinguido entre las demás naciones, para que sean míos.
Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová, Dios de Israel.Josué replicó: —Desháganse de los dioses ajenos que todavía conservan. ¡Vuélvanse de todo corazón al Señor, Dios de Israel!
Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate, bautízate y lava tus pecados invocando su nombre.Y ahora, ¿qué esperas? Levántate, bautízate y lávate de tus pecados, invocando su nombre.
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.En consecuencia, ya que hemos sido justificados mediante la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Pues el fin de la Ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree.De hecho, Cristo es el fin de la ley, para que todo el que cree reciba la justicia.
Mas yo soy Jehová, tu Dios, desde la tierra de Egipto; no conocerás, pues, otro dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí.Pero yo soy el Señor tu Dios desde que estabas en Egipto. No conocerás a otro Dios fuera de mí, ni a otro Salvador que no sea yo.
Ahora, pues, dice Jehová, convertíos ahora a mí con todo vuestro corazón, con ayuno, llanto y lamento.Ahora bien —afirma el Señor—, vuélvanse a mí de todo corazón, con ayuno, llantos y lamentos.
Aquel, pues, que os da el Espíritu y hace maravillas entre vosotros, ¿lo hace por las obras de la Ley o por el oír con fe?Al darles Dios su Espíritu y hacer milagros entre ustedes, ¿lo hace por las obras que demanda la ley o por la fe con que han aceptado el mensaje?

Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.
Leer más...

Versículo de la Biblia del día

De lo profundo, Jehová, a ti clamo.
Señor, oye mi voz;
estén atentos tus oídos
a la voz de mi súplica.

Reciba el Versículo Diario:

Notificación diariaCorreo electrónicoFacebookAndroid-appEn tu sitio web

Versículo de la Biblia al Azar

Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.Siguiente versículo!Con imagen

Apoyar DailyVerses.net

Ayúdame a difundir la Palabra de Dios:
Donación