- ¿Y por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?
- Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.
- Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.
- Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios.
- Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo.
- Gustad, y ved que es bueno Jehová;
Dichoso el hombre que confía en él. - Y caí al suelo, y oí una voz que me decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?
- Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
- Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros.
- Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer.
- Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.
- Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
- Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios.
- He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.
- Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
- Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.
- Así será mi palabra que sale de mi boca;
no volverá a mí vacía,
sino que hará lo que yo quiero,
y será prosperada en aquello para que la envié. - El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.
- Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma; que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad?
- El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.
- Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
- Mas os ruego, hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y tropiezos en contra de la doctrina que vosotros habéis aprendido, y que os apartéis de ellos.
- El que cubre la falta busca amistad;
Mas el que la divulga, aparta al amigo. - Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
- Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo.
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