- Y caí al suelo, y oí una voz que me decía: «Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?».
- Y ahora, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados invocando su nombre.
Temas relacionados
Hablar
Muerte y vida están...
Milagros
Mirándolos Jesús, dijo: Para...
Persecución
Y en verdad, todos...
Bautismo
Pues todos sois hijos...
Pecado
¿O no sabéis que...
Purificación
Por tanto, amados, teniendo...