Por eso os digo que todas las cosas por las que oréis y pidáis, creed que ya las habéis recibido, y os serán concedidas. | Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá. |
Jesús le dijo: «¿Cómo si tú puedes?». Todas las cosas son posibles para el que cree. | Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible. |
|
Mirándolos Jesús, dijo: Para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque todas las cosas son posibles para Dios. | Entonces Jesús, mirándolos, dijo: Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios. |
Pues, ¿de qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero y perder su alma? | Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? |
Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. | Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. |
El segundo es este: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo». No hay otro mandamiento mayor que estos. | Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos. |
El que crea y sea bautizado será salvo; pero el que no crea será condenado. | El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado. |
Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha sanado. Y al instante recobró la vista, y le seguía por el camino. | Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha salvado. Y en seguida recobró la vista, y seguía a Jesús en el camino. |
Sentándose, llamó a los doce y les dijo: Si alguno desea ser el primero, será el último de todos y el servidor de todos. | Entonces él se sentó y llamó a los doce, y les dijo: Si alguno quiere ser el primero, será el postrero de todos, y el servidor de todos. |
Y cuando estéis orando, perdonad si tenéis algo contra alguien, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone vuestras transgresiones. | Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas. |