Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. | Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios. |
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. | Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. |
Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. | Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. |
El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio. | El tiempo se ha cumplido y el reino de Dios se ha acercado. ¡Arrepentíos y creed en el evangelio! |
Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. | Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. |
Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios. | Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo y se sentó a la diestra de Dios. |
No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo. | No desecho la gracia de Dios, pues si por la Ley viniera la justicia, entonces en vano murió Cristo. |
Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. | Y no entristezcáis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. |
Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. | Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu, porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. |
Porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. | Pues os es necesaria la paciencia, para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. |
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. | Mas a todos los que lo recibieron, a quienes creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. |
Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. | Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro. |
Para que con gozo llegue a vosotros por la voluntad de Dios, y que sea recreado juntamente con vosotros. | Para que, si es la voluntad de Dios, llegue con gozo a vosotros y pueda descansar entre vosotros. |
Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. | Le respondió Jesús: —De cierto, de cierto te digo que el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios. |
Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto. | Sobre todo, vestíos de amor, que es el vínculo perfecto. |
El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. | Él respondió y dijo: —Escrito está: “No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” |
Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. | Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y ésta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. |
Todas vuestras cosas sean hechas con amor. | Todas vuestras cosas sean hechas con amor. |
Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie. | Cuando alguno es tentado no diga que es tentado de parte de Dios, porque Dios no puede ser tentado por el mal ni él tienta a nadie. |
Como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios. | Actuad como personas libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios. |
Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto mismo. | Pues por esto pagáis también los tributos, porque las autoridades están al servicio de Dios, dedicadas continuamente a este oficio. |
Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él. | Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros seamos justicia de Dios en él. |
Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. | Respondió Jesús: —De cierto, de cierto te digo que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios. |
Misericordia y paz y amor os sean multiplicados. | Misericordia, paz y amor os sean multiplicados. |
Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo. | Hijitos, vosotros sois de Dios y los habéis vencido, porque mayor es el que está en vosotros que el que está en el mundo. |
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