Versículos de la Biblia sobre 'Mas'
- Porque como los cielos son más altos que la tierra,
así mis caminos son más altos que vuestros caminos,
y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. - Más vale el buen nombre que las muchas riquezas,
y el favor que la plata y el oro. - Me he gozado en el camino de tus testimonios,
más que en todas las riquezas. - No os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. Porque la vida es más que el alimento, y el cuerpo más que la ropa.
- Yo establezco mi pacto con vosotros, y nunca más volverá a ser exterminada toda carne por las aguas del diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra.
- Pero en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
- El hombre de muchos amigos se arruina,
pero hay amigo más unido que un hermano. - Antes bien, sea vuestro hablar: «Sí, sí» o «No, no»; y lo que es más de esto, procede del mal.
- Por eso os digo, no os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis o qué beberéis; ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que la ropa?
- Por consiguiente, ya no nos juzguemos los unos a los otros, sino más bien decidid esto: no poner obstáculo o piedra de tropiezo al hermano.
- Pues tendré misericordia de sus iniquidades,
y nunca más me acordaré de sus pecados. - El hacer justicia y derecho
es más deseado por el Señor que el sacrificio. - He aquí el orgulloso:
en él, su alma no es recta,
mas el justo por su fe vivirá. - Mas yo he sido el Señor tu Dios
desde la tierra de Egipto;
no reconocerás a otro dios fuera de mí,
pues no hay más salvador que yo. - Mas tú, oh Señor, eres escudo en derredor mío,
mi gloria, y el que levanta mi cabeza. - Tesoros mal adquiridos no aprovechan,
mas la justicia libra de la muerte. - El sabio de corazón aceptará mandatos,
mas el necio charlatán será derribado. - Pues, ¡cuánto más vale un hombre que una oveja! Por tanto, es lícito hacer bien en el día de reposo.
- Del mandamiento de sus labios no me he apartado,
he atesorado las palabras de su boca más que mi comida. - Mas tú, oh Señor, reinas para siempre,
tu trono permanece de generación en generación. - Más valen dos que uno solo,
pues tienen mejor remuneración por su trabajo. - ¿O piensas que no puedo rogar a mi Padre, y Él pondría a mi disposición ahora mismo más de doce legiones de ángeles?
- Sécase la hierba, marchítase la flor,
mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. - El impío pide prestado y no paga,
mas el justo es compasivo y da. - Y les dijo: El que reciba a este niño en mi nombre, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe a aquel que me envió; porque el que es más pequeño entre todos vosotros, ese es grande.
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Estén atentos tus oídos
a la voz de mis súplicas.