- Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No sois vosotros de mucho más valor que ellas?
- Él que anda en integridad anda seguro,
mas el que pervierte sus caminos será descubierto. - Pero el que no la sabía, e hizo cosas que merecían castigo, será azotado poco. A todo el que se le haya dado mucho, mucho se demandará de él; y al que mucho le han confiado, más le exigirán.
- El necio rechaza la disciplina de su padre,
mas el que acepta la reprensión es prudente. - Por la soberbia solo viene la contienda,
mas con los que reciben consejos está la sabiduría. - Con la boca el impío destruye a su prójimo,
mas por el conocimiento los justos serán librados. - Porque en la mucha sabiduría hay mucha angustia,
y quien aumenta el conocimiento, aumenta el dolor. - En las muchas palabras, la transgresión es inevitable,
mas el que refrena sus labios es prudente. - Por tanto, diles: «Así dice el Señor Dios: “Ninguna de mis palabras se demorará más. Toda palabra que diga se cumplirá” » —declara el Señor Dios.
- Mas para vosotros que teméis mi nombre, se levantará el sol de justicia con la salud en sus alas; y saldréis y saltaréis como terneros del establo.
- Y que amarle con todo el corazón y con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más que todos los holocaustos y los sacrificios.
- En todo trabajo hay ganancia,
pero el vano hablar conduce solo a la pobreza. - Siempre tenemos que dar gracias a Dios por vosotros, hermanos, como es justo, porque vuestra fe aumenta grandemente, y el amor de cada uno de vosotros hacia los demás abunda más y más.
- Mas Él fue herido por nuestras transgresiones,
molido por nuestras iniquidades.
El castigo, por nuestra paz, cayó sobre Él,
y por sus heridas hemos sido sanados. - ¿Cuánto más la sangre de Cristo, el cual por el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, purificará vuestra conciencia de obras muertas para servir al Dios vivo?
- Él que encubre sus pecados no prosperará,
mas el que los confiesa y los abandona hallará misericordia. - Porque en virtud de la gracia que me ha sido dada, digo a cada uno de vosotros que no piense más alto de sí que lo que debe pensar, sino que piense con buen juicio, según la medida de fe que Dios ha distribuido a cada uno.
- Y Él me ha dicho: Te basta mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, muy gustosamente me gloriaré más bien en mis debilidades, para que el poder de Cristo more en mí.
- Yo a la verdad os bautizo con agua para arrepentimiento, pero el que viene detrás de mí es más poderoso que yo, a quien no soy digno de quitarle las sandalias; Él os bautizará con el Espíritu Santo y con fuego.
- Pero a todos los que le recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios, es decir, a los que creen en su nombre.
- Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia;
conforme a lo inmenso de tu compasión, borra mis transgresiones.
Lávame por completo de mi maldad,
y límpiame de mi pecado. - Mas serviréis al Señor vuestro Dios, y Él bendecirá tu pan y tu agua; y yo quitaré las enfermedades de en medio de ti.
- Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la división del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir los pensamientos y las intenciones del corazón.
- La memoria del justo es bendita,
pero el nombre del impío se pudrirá. - Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre jamás. Amén.
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