Todas las cosas me son lícitas, pero no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, pero yo no me dejaré dominar por ninguna. | «Todo me está permitido», pero no todo es para mi bien. «Todo me está permitido», pero no dejaré que nada me domine. |
Te alabaré, Jehová, con todo mi corazón. Contaré todas tus maravillas. | Quiero alabarte, Señor, con todo el corazón, y contar todas tus maravillas. |
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Este pobre clamó, y lo oyó Jehová y lo libró de todas sus angustias. | Este pobre clamó, y el Señor le oyó y lo libró de todas sus angustias. |
Todas vuestras cosas sean hechas con amor. | Hagan todo con amor. |
El odio despierta rencillas, pero el amor cubre todas las faltas. | El odio es motivo de disensiones, pero el amor cubre todas las faltas. |
Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas lo librará Jehová. | Muchas son las angustias del justo, pero el Señor lo librará de todas ellas. |
El fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios y velad en oración. | Ya se acerca el fin de todas las cosas. Así que, para orar bien, manténganse sobrios y con la mente despejada. |
Justo es Jehová en todos sus caminos y misericordioso en todas sus obras. | El Señor es justo en todos sus caminos y bondadoso en todas sus obras. |
Todas las cosas por medio de él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho fue hecho. | Por medio de él todas las cosas fueron creadas; sin él, nada de lo creado llegó a existir. |
Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. | Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. |
Porque de él, por él y para él son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén. | Porque todas las cosas proceden de él, y existen por él y para él. ¡A él sea la gloria por siempre! Amén. |
Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas; todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí. | Un abismo llama a otro abismo en el rugir de tus cascadas; todas tus ondas y tus olas se han precipitado sobre mí. |
Convertíos y apartaos de todas vuestras transgresiones, y no os será la iniquidad causa de ruina. | Arrepiéntanse y apártense de todas sus maldades, para que el pecado no les acarree la ruina. |
Toda casa es hecha por alguien; pero el que hizo todas las cosas es Dios. | Porque toda casa tiene su constructor, pero el constructor de todo es Dios. |
Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. | Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. |
Y será predicado este evangelio del Reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin. | Y este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin. |
Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y daré a tu descendencia todas estas tierras, y todas las naciones de la tierra serán benditas en tu simiente, por cuanto oyó Abraham mi voz y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes. | Multiplicaré a tus descendientes como las estrellas del cielo, y les daré todas esas tierras. Por medio de tu descendencia todas las naciones de la tierra serán bendecidas, porque Abraham me obedeció y cumplió mis preceptos y mis mandamientos, mis normas y mis enseñanzas. |
El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? | El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no habrá de darnos generosamente, junto con él, todas las cosas? |
Sabemos, además, que a los que aman a Dios, todas las cosas los ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. | Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. |
“Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.” Éste es el principal mandamiento. | Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. |
Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas y os recordará todo lo que yo os he dicho. | Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les hará recordar todo lo que les he dicho. |
Para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas y para quien nosotros existimos; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual han sido creadas todas las cosas y por quien nosotros también existimos. | Para nosotros no hay más que un solo Dios, el Padre, de quien todo procede y para el cual vivimos; y no hay más que un solo Señor, es decir, Jesucristo, por quien todo existe y por medio del cual vivimos. |
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén. | Al que puede hacer muchísimo más que todo lo que podamos imaginarnos o pedir, por el poder que obra eficazmente en nosotros, ¡a él sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones, por los siglos de los siglos! Amén. |
Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado. Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. | Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo. |
Claman los justos, y Jehová oye y los libra de todas sus angustias. Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón y salva a los contritos de espíritu. | Los justos claman, y el Señor los oye; los libra de todas sus angustias. El Señor está cerca de los quebrantados de corazón, y salva a los de espíritu abatido. |