Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se ha perfeccionado en nosotros.
Nadie ha visto jamás a Dios, pero, si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece entre nosotros, y entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente.
Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros y su amor se ha perfeccionado en nosotros.
A Dios nadie le ha visto jamás. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros y su amor se perfecciona en nosotros.
Temas relacionados
Amor
El amor es sufrido...
Dios
Jehová está en medio...
Vecino
Y el segundo es...
Esperanza
Porque yo sé los...
Fe
Por tanto, os digo...
Familia
Y estas palabras que...
Versículo de la Biblia del día
Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte;Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.