De veras te aseguro que quien no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios —dijo Jesús. | Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. |
Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo. | Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. |
El mundo se acaba con sus malos deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. | Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. |
No agravien al Espíritu Santo de Dios, con el cual fueron sellados para el día de la redención. | Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. |
Después de hablar con ellos, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se sentó a la derecha de Dios. | Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios. |
Se ha cumplido el tiempo —decía—. El reino de Dios está cerca. ¡Arrepiéntanse y crean las buenas nuevas! | El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio. |
En efecto, nosotros somos colaboradores al servicio de Dios; y ustedes son el campo de cultivo de Dios, son el edificio de Dios. | Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios. |
Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. | Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. |
En conclusión, ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios. | Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios. |
No desecho la gracia de Dios. Si la justicia se obtuviera mediante la ley, Cristo habría muerto en vano. | No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo. |
Porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Esta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe. | Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. |
Por tanto, imiten a Dios, como hijos muy amados. | Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. |
Jesús le respondió: —Escrito está: “No solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”. | El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. |
Porque la paga del pecado es muerte, mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor. | Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. |
Queridos hermanos, amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios, y todo el que ama ha nacido de él y lo conoce. | Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. |
Yo te aseguro que quien no nazca de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios —respondió Jesús—. | Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. |
Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido. | Porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. |
De este modo, por la voluntad de Dios, llegaré a ustedes con alegría y podré descansar entre ustedes por algún tiempo. | Para que con gozo llegue a vosotros por la voluntad de Dios, y que sea recreado juntamente con vosotros. |
No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra. | No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. |
Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios. | Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él. |
Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes. | La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén. |
Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. | Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. |
Si alguno destruye el templo de Dios, él mismo será destruido por Dios; porque el templo de Dios es sagrado, y ustedes son ese templo. | Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es. |
Ahora bien, Dios nos ha revelado esto por medio de su Espíritu, pues el Espíritu lo examina todo, hasta las profundidades de Dios. | Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. |
Por eso mismo pagan ustedes impuestos, pues las autoridades están al servicio de Dios, dedicadas precisamente a gobernar. | Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto mismo. |
Versículo de la Biblia del día
No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí.Versículo de la Biblia al Azar
Alaba, alma mía, al Señor;alabe todo mi ser su santo nombre.Siguiente versículo!Con imagen