Así que ayunamos y oramos a nuestro Dios pidiéndole su protección y él nos escuchó.


Ayunamos, pues, y pedimos a nuestro Dios sobre esto, y él nos fue propicio.
Ayunamos, pues, y pedimos a nuestro Dios sobre esto, y él nos fue propicio.
Ayunamos, pues, y pedimos a nuestro Dios acerca de esto, y Él escuchó nuestra súplica.
Versículo de la Biblia del día
Reconoce en tu corazón que, así como un padre disciplina a su hijo, también el Señor tu Dios te disciplina a ti.Versículo de la Biblia al Azar
No permitirá que tu pie resbale;jamás duerme el que te cuida.Siguiente versículo!Con imagen





