- Si el pobre recurría a mí, yo lo rescataba
y también al huérfano si no tenía quien lo ayudara.
Me bendecían los desahuciados;
¡por mí gritaba de alegría el corazón de las viudas!
Versículo de la Biblia del día
Que refrene su lengua de hablar el maly sus labios de proferir engaños.





