Dios aborrece hasta la oración
del que se niega a obedecer la ley.
del que se niega a obedecer la ley.
El que aparta su oído para no oír la ley,
Su oración también es abominable.
Su oración también es abominable.
Incluso la oración le es abominable
al que aparta su oído para no escuchar la Ley.
al que aparta su oído para no escuchar la Ley.
Al que aparta su oído para no oír la ley,
su oración también es abominación.
su oración también es abominación.