Versículos de la Biblia sobre la Vida
- El Señor te protegerá;
de todo mal protegerá tu vida.
El Señor te cuidará en el hogar y en el camino,
desde ahora y para siempre. - Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.
- En el agua se refleja el rostro,
y en el corazón se refleja la persona. - Vivimos por fe, no por vista.
- Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor.
- El que va tras la justicia y el amor
halla vida, prosperidad y honra. - ¿De qué sirve ganar el mundo entero si se pierde la vida?
- Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu,
pero Dios fortalece mi corazón;
él es mi herencia eterna. - En efecto,
«el que quiera amar la vida
y gozar de días felices,
que refrene su lengua de hablar el mal
y sus labios de proferir engaños;
que se aparte del mal y haga el bien;
que busque la paz y la siga.» - Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo.
- Guíame, pues eres mi roca y mi fortaleza,
dirígeme por amor a tu nombre. - Por sobre todas las cosas cuida tu corazón,
porque de él mana la vida. - Señor, hazme conocer tus caminos;
muéstrame tus sendas. - No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.
- Yo soy el pan de vida —declaró Jesús—. El que a mí viene nunca pasará hambre, y el que en mí cree nunca más volverá a tener sed.
- Guarda silencio ante el Señor,
y espera en él con paciencia;
no te irrites ante el éxito de otros,
de los que maquinan planes malvados. - La bondad y el amor me seguirán
todos los días de mi vida;
y en la casa del Señor
habitaré para siempre. - El que refrena su lengua protege su vida,
pero el ligero de labios provoca su ruina. - Hoy te ordeno que ames al Señor tu Dios, que andes en sus caminos, y que cumplas sus mandamientos, preceptos y leyes. Así vivirás y te multiplicarás, y el Señor tu Dios te bendecirá en la tierra de la que vas a tomar posesión.
- Nunca preguntes por qué todo tiempo pasado fue mejor. No es de sabios hacer tales preguntas.
- De aquel que cree en mí, como dice la Escritura, brotarán ríos de agua viva.
- Cuando te vengan buenos tiempos, disfrútalos; pero, cuando te lleguen los malos, piensa que unos y otros son obra de Dios, y que el hombre nunca sabe con qué habrá de encontrarse después.
- El que atiende a la corrección va camino a la vida;
el que la rechaza se pierde. - He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí.
- Busquen la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.