Versículos de la Biblia sobre la Paciencia
- El que es paciente muestra gran discernimiento;
el que es agresivo muestra mucha insensatez. - El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor.
- Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración.
- Siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor.
- Pero, si esperamos lo que todavía no tenemos, en la espera mostramos nuestra constancia.
- No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos.
- Más vale ser paciente que valiente;
más vale el dominio propio que conquistar ciudades. - Guarda silencio ante el Señor,
y espera en él con paciencia;
no te irrites ante el éxito de otros,
de los que maquinan planes malvados. - Pon tu esperanza en el Señor;
ten valor, cobra ánimo;
¡pon tu esperanza en el Señor! - Ustedes quédense quietos, que el Señor presentará batalla por ustedes.
- El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se arrepientan.
- Por lo tanto, como escogidos de Dios, santos y amados, revístanse de afecto entrañable y de bondad, humildad, amabilidad y paciencia.
- Que el Dios que infunde aliento y perseverancia les conceda vivir juntos en armonía, conforme al ejemplo de Cristo Jesús.
- Porque solo un instante dura su enojo,
pero toda una vida su bondad.
Si por la noche hay llanto,
por la mañana habrá gritos de alegría. - Por la mañana, Señor, escuchas mi clamor;
por la mañana te presento mis ruegos,
y quedo a la espera de tu respuesta. - Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad;
por eso se levanta para mostrarles compasión.
Porque el Señor es un Dios de justicia.
¡Dichosos todos los que en él esperan! - El Señor es clemente y compasivo,
lento para la ira y grande en amor. - Pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.
- Pero precisamente por eso Dios fue misericordioso conmigo, a fin de que en mí, el peor de los pecadores, pudiera Cristo Jesús mostrar su infinita bondad. Así llego a servir de ejemplo para los que, creyendo en él, recibirán la vida eterna.
- Pero no olviden, queridos hermanos, que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.
- Predica la Palabra; persiste en hacerlo, sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar.
- Por lo tanto, manténganse despiertos, porque no saben qué día vendrá su Señor.
- Vengo pronto. Aférrate a lo que tienes, para que nadie te quite la corona.
- Rásguense el corazón
y no las vestiduras.
Vuélvanse al Señor su Dios,
porque él es bondadoso y compasivo,
lento para la ira y lleno de amor,
cambia de parecer y no castiga. - El futuro de los justos es halagüeño;
la esperanza de los malvados se desvanece.