El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio sabe dominarla. | El necio da rienda suelta a toda su ira, Mas el sabio al fin la sosiega. |
Los labios del necio son causa de contienda; su boca incita a la riña. | Los labios del necio traen contienda; Y su boca los azotes llama. |
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El hijo sabio es la alegría de su padre; el hijo necio es el pesar de su madre. | El hijo sabio alegra al padre, Pero el hijo necio es tristeza de su madre. |
Al necio no le complace el discernimiento; tan solo hace alarde de su propia opinión. | No toma placer el necio en la inteligencia, Sino en que su corazón se descubra. |
El necio muestra en seguida su enojo, pero el prudente pasa por alto el insulto. | El necio al punto da a conocer su ira; Mas el que no hace caso de la injuria es prudente. |
El de labios mentirosos disimula su odio, y el que propaga calumnias es un necio. | El que encubre el odio es de labios mentirosos; Y el que propaga calumnia es necio. |
El necio desdeña la corrección de su padre; el que la acepta demuestra prudencia. | El necio menosprecia el consejo de su padre; Mas el que guarda la corrección vendrá a ser prudente. |
Hasta un necio pasa por sabio si guarda silencio; se le considera prudente si cierra la boca. | Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es entendido. |
Las palabras del sabio son placenteras, pero los labios del necio son su ruina. | Las palabras de la boca del sabio son llenas de gracia, mas los labios del necio causan su propia ruina. |
El de sabio corazón acata las órdenes, pero el necio y rezongón va camino al desastre. | El sabio de corazón recibirá los mandamientos; Mas el necio de labios caerá. |
Honroso es al hombre evitar la contienda, pero no hay necio que no inicie un pleito. | Honra es del hombre dejar la contienda; Mas todo insensato se envolverá en ella. |
No va bien con los necios el lenguaje refinado, ni con los gobernantes, la mentira. | No conviene al necio la altilocuencia; !!Cuánto menos al príncipe el labio mentiroso! |
El que ama la disciplina ama el conocimiento, pero el que la aborrece es un necio. | El que ama la instrucción ama la sabiduría; Mas el que aborrece la reprensión es ignorante. |
El que con sabios anda, sabio se vuelve; el que con necios se junta, saldrá mal parado. | El que anda con sabios, sabio será; Mas el que se junta con necios será quebrantado. |
El temor del Señor es el principio del conocimiento; los necios desprecian la sabiduría y la disciplina. | El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. |
Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos. | Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. |
Cuando hagas un voto a Dios, no tardes en cumplirlo, porque a Dios no le agradan los necios. Cumple tus votos. | Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. |
Que nadie se engañe. Si alguno de ustedes se cree sabio según las normas de esta época, hágase ignorante para así llegar a ser sabio. | Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros se cree sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio. |
Habrá allí una calzada que será llamada Camino de santidad. No viajarán por ella los impuros, ni transitarán por ella los necios; será solo para los que siguen el camino. | Y habrá allí calzada y camino, y será llamado Camino de Santidad; no pasará inmundo por él, sino que él mismo estará con ellos; el que anduviere en este camino, por torpe que sea, no se extraviará. |
Los que quieren enriquecerse caen en la tentación y se vuelven esclavos de sus muchos deseos. Estos afanes insensatos y dañinos hunden a la gente en la ruina y en la destrucción. | Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición. |