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Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo. ¿Cuándo vendré y… Salmo 42:2

Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo.
¿Cuándo vendré y me presentaré delante de Dios?
Salmo 42:2 alma proximidad búsqueda
Vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.
Apocalipsis 3:11 segunda venida recompensa paciencia

Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.
Juan 16:8 Espíritu Santo mediador pecado
Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya, porque si no me voy, el Consolador no vendrá a vosotros; pero si me voy, os lo enviaré.
Juan 16:7 consolador Espíritu recibir
Por tanto os digo: No os angustiéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que el vestido?
Mateo 6:25 alimento vida preocupación
¡Levántate, resplandece, porque ha venido tu luz
y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti!
Isaías 60:1 valioso Dios belleza
Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta:
aunque vuestros pecados sean como la grana,
como la nieve serán emblanquecidos;
aunque sean rojos como el carmesí,
vendrán a ser como blanca lana.
Isaías 1:18 pecado perdón purificación
El fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios y velad en oración.
1 Pedro 4:7 segunda venida descanso oración
Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas, porque vergonzoso es aun hablar de lo que ellos hacen en secreto.
Efesios 5:11-12 pecado hablar ídolos
¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
1 Juan 5:5 fe Jesús superación
Y el Verbo se hizo carne
y habitó entre nosotros lleno de gracia y de verdad;
y vimos su gloria,
gloria como del unigénito del Padre.
Juan 1:14 verdad Jesús Palabra de Dios
Venid, adoremos y postrémonos;
arrodillémonos delante de Jehová, nuestro hacedor.
Salmo 95:6 creación adoración humildad
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.
Mateo 11:28 esperanza estímulo descanso
Honra a las viudas que en verdad lo son.
1 Timoteo 5:3 vecino comunidad viudas
Tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.
Romanos 8:18 vida eterna salvación sufrimiento
Hijitos, vosotros sois de Dios y los habéis vencido, porque mayor es el que está en vosotros que el que está en el mundo.
1 Juan 4:4 salvación superación todopoderoso
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo.
Juan 16:33 estímulo paz superación
Si tu hermano peca contra ti, repréndelo; y si se arrepiente, perdónalo. Y si siete veces al día peca contra ti, y siete veces al día vuelve a ti, diciendo: “Me arrepiento”, perdónalo.
Lucas 17:3b-4 pecado arrepentimiento perdón
Por tanto, también vosotros estad preparados, porque el Hijo del hombre vendrá a la hora que no pensáis.
Mateo 24:44 Mesías segunda venida
Ahora yo, Nabucodonosor, alabo, engrandezco y glorifico al Rey del cielo, porque todas sus obras son verdaderas y sus caminos justos; y él puede humillar a los que andan con soberbia.
Daniel 4:37 justicia humildad adoración
Cercano está Jehová a todos los que lo invocan,
a todos los que lo invocan de veras.
Salmo 145:18 confianza fiabilidad oración
Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí.
Juan 15:26 consolador Espíritu Santo Padre
Este Jesús es la piedra rechazada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo.
Hechos 4:11 Jesús
Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.
Juan 15:1-2 frutos pecado obediencia
¡Vengo pronto!, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Apocalipsis 22:12 segunda venida Jesús recompensa

Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales les dijeron: —Galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como lo habéis visto ir al cielo.