
Pues los sufrimientos ligeros y efímeros que ahora padecemos producen una gloria eterna que vale muchísimo más que todo sufrimiento.
Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.
Pues esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.
Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación.
Versículo de la Biblia del día
El gran amor del Señor nunca se acaba,y su compasión jamás se agota.
Cada mañana se renuevan sus bondades;
¡muy grande es su fidelidad!