- Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
- No te afanes por hacerte rico;
Sé prudente, y desiste. - Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.
- Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia.
- El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.
- Por tanto, ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado.
- ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
- Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis.
- Así dijo Jehová:
Paraos en los caminos, y mirad,
y preguntad por las sendas antiguas,
cuál sea el buen camino, y andad por él,
y hallaréis descanso para vuestra alma.
Mas dijeron: No andaremos. - Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.
- Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él.
- De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído.
- Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.
- Bueno y recto es Jehová;
Por tanto, él enseñará a los pecadores el camino.
Encaminará a los humildes por el juicio,
Y enseñará a los mansos su carrera. - Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios.
- Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra.
- Porque toda casa es hecha por alguno; pero el que hizo todas las cosas es Dios.
- Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
- Por tanto, tú te has engrandecido, Jehová Dios; por cuanto no hay como tú, ni hay Dios fuera de ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos.
- Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
- Porque a mis ojos fuiste de gran estima,
fuiste honorable, y yo te amé;
daré, pues, hombres por ti,
y naciones por tu vida. - Entonces las iglesias tenían paz por toda Judea, Galilea y Samaria; y eran edificadas, andando en el temor del Señor, y se acrecentaban fortalecidas por el Espíritu Santo.
- Por lo cual no resbalará jamás;
En memoria eterna será el justo. - Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante.
- Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.
Temas relacionados
Jesús
Entonces Jesús, mirándolos, dijo...
Justicia
El que sigue la...
Vida
Jehová te guardará de...
Salvación
Y en ningún otro...
Gracia
Acerquémonos, pues, confiadamente al...
Dios
Jehová está en medio...