Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. | Por la mañana, Señor, escuchas mi clamor; por la mañana te presento mis ruegos, y quedo a la espera de tu respuesta. |
Por tanto, Jehová esperará para tener piedad de vosotros, y por tanto, será exaltado teniendo de vosotros misericordia; porque Jehová es Dios justo; bienaventurados todos los que confían en él. | Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad; por eso se levanta para mostrarles compasión. Porque el Señor es un Dios de justicia. ¡Dichosos todos los que en él esperan! |
Misericordioso y clemente es Jehová; Lento para la ira, y grande en misericordia. | El Señor es clemente y compasivo, lento para la ira y grande en amor. |
Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. | Pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. |
Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. | Pero no olviden, queridos hermanos, que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. |
Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. | Por lo tanto, manténganse despiertos, porque no saben qué día vendrá su Señor. |
He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona. | Vengo pronto. Aférrate a lo que tienes, para que nadie te quite la corona. |
Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. | Rásguense el corazón y no las vestiduras. Vuélvanse al Señor su Dios, porque él es bondadoso y compasivo, lento para la ira y lleno de amor, cambia de parecer y no castiga. |
La esperanza de los justos es alegría; Mas la esperanza de los impíos perecerá. | El futuro de los justos es halagüeño; la esperanza de los malvados se desvanece. |
Jehová es tardo para la ira y grande en poder, y no tendrá por inocente al culpable. Jehová marcha en la tempestad y el torbellino, y las nubes son el polvo de sus pies. | El Señor es lento para la ira, imponente en su fuerza. El Señor no deja a nadie sin castigo. Camina en el huracán y en la tormenta; las nubes son el polvo de sus pies. |
Versículo de la Biblia del día
Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.