Versículos de la Biblia sobre 'Riquezas'
- Vale más la buena fama que las muchas riquezas,
y más que oro y plata, la buena reputación. - No te afanes acumulando riquezas;
no te obsesiones con ellas. - Recompensa de la humildad y del temor del Señor
son las riquezas, la honra y la vida. - En él tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de la gracia.
- Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús.
- Me regocijo en el camino de tus estatutos
más que en todas las riquezas. - Aleja de mí la falsedad y la mentira;
no me des pobreza ni riquezas,
sino solo el pan de cada día. - ¡Qué profundas son las riquezas de la sabiduría y del conocimiento de Dios!
¡Qué indescifrables sus juicios
e impenetrables sus caminos! - La bendición del Señor trae riquezas,
y nada se gana con preocuparse. - Honra al Señor con tus riquezas
y con los primeros frutos de tus cosechas. - Nadie puede servir a dos señores, pues menospreciará a uno y amará al otro, o querrá mucho a uno y despreciará al otro. No se puede servir a la vez a Dios y a las riquezas.
- Además, a quien Dios le concede abundancia y riquezas, también le concede comer de ellas, y tomar su parte y disfrutar de sus afanes, pues esto es don de Dios.
- Las riquezas mal habidas no sirven de nada,
pero la justicia libra de la muerte. - Más vale tener poco, con temor del Señor,
que muchas riquezas con grandes angustias. - El que recibió la semilla que cayó entre espinos es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de esta vida y el engaño de las riquezas la ahogan, de modo que esta no llega a dar fruto.
- En el día de la ira de nada sirve ser rico,
pero la justicia libra de la muerte. - A los ricos de este mundo, mándales que no sean arrogantes ni pongan su esperanza en las riquezas, que son tan inseguras, sino en Dios, que nos provee de todo en abundancia para que lo disfrutemos.
- Con su riqueza el rico pone a salvo su vida,
pero al pobre no hay ni quien lo amenace. - Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor.
- Quien ama el dinero, de dinero no se sacia. Quien ama las riquezas nunca tiene suficiente. ¡También esto es absurdo!
- El dinero mal habido pronto se acaba;
quien ahorra, poco a poco se enriquece. - La casa y el dinero se heredan de los padres,
pero la esposa inteligente es un don del Señor. - Ciudad amurallada es la riqueza para el rico,
y este cree que sus muros son inexpugnables. - A estos Dios se propuso dar a conocer cuál es la gloriosa riqueza de este misterio entre las naciones, que es Cristo en ustedes, la esperanza de gloria.
- Pido también que les sean iluminados los ojos del corazón para que sepan a qué esperanza él los ha llamado, cuál es la riqueza de su gloriosa herencia entre los santos.
