Versículos de la Biblia sobre 'TU MIRADA EN MI SENOR&p=3&p=2'
- El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él.
- No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
- En mi corazón he guardado tus dichos,
para no pecar contra ti. - Que tus ojos miren lo recto
y que tus párpados se abran a lo que tienes delante. - ¡Crea en mí, Dios, un corazón limpio,
y renueva un espíritu recto dentro de mí! - Pues aún no está la palabra en mi lengua
y ya tú, Jehová, la sabes toda. - El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior brotarán ríos de agua viva.
- Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.
- Bendeciré a Jehová en todo tiempo;
su alabanza estará de continuo en mi boca. - Todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
- A Jehová cantaré en mi vida;
a mi Dios cantaré salmos mientras viva. - En mi angustia invoqué a Jehová
y clamé a mi Dios.
Él oyó mi voz desde su Templo
y mi clamor llegó hasta sus oídos. - Mientras callé, se envejecieron mis huesos
en mi gemir todo el día. - Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queráis y os será hecho.
- Jehová cumplirá su propósito en mí.
Tu misericordia, Jehová, es para siempre;
¡no desampares la obra de tus manos! - Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea completo.
- Jesús les respondió: —Yo soy el pan de vida. El que a mí viene nunca tendrá hambre, y el que en mí cree no tendrá sed jamás.
- Lo que aprendisteis, recibisteis, oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros.
- Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador,
y grande en misericordia para con todos los que te invocan. - Al vencedor le concederé que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono.
- Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo.
- Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
- Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí y yo en él, éste lleva mucho fruto, porque separados de mí nada podéis hacer.
- Porque sé que por vuestra oración y la suministración del Espíritu de Jesucristo, esto resultará en mi liberación.
- De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él también las hará; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre.
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