- De hecho, Cristo es el fin de la ley, para que todo el que cree reciba la justicia.
- Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.
- El que va tras la justicia y el amor
halla vida, prosperidad y honra. - El que mucho habla, mucho yerra;
el que es sabio refrena su lengua. - Y él nos ha dado este mandamiento: el que ama a Dios, ame también a su hermano.
- El que adquiere cordura a sí mismo se ama,
y el que retiene el discernimiento prospera. - El que atiende a la palabra prospera.
¡Dichoso el que confía en el Señor! - El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida.
- ¿Cómo que si puedo? Para el que cree, todo es posible.
- El de labios mentirosos disimula su odio,
y el que propaga calumnias es un necio. - Les digo que así mismo se alegra Dios con sus ángeles por un pecador que se arrepiente.
- El que ama la disciplina ama el conocimiento,
pero el que la aborrece es un necio. - Temer a los hombres resulta una trampa,
pero el que confía en el Señor sale bien librado. - El que perdona la ofensa cultiva el amor;
el que insiste en la ofensa divide a los amigos. - El malvado obtiene ganancias ilusorias;
el que siembra justicia asegura su ganancia. - Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada.
- El que da testimonio de estas cosas, dice: «Sí, vengo pronto».
Amén. ¡Ven, Señor Jesús! - El que refrena su lengua protege su vida,
pero el ligero de labios provoca su ruina. - El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rechaza al Hijo no sabrá lo que es esa vida, sino que permanecerá bajo el castigo de Dios.
- El que cumple el mandamiento cumple consigo mismo;
el que descuida su conducta morirá. - Mantengamos firme la esperanza que profesamos, porque fiel es el que hizo la promesa.
- El mundo se acaba con sus malos deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
- Todo el que comete pecado quebranta la ley; de hecho, el pecado es transgresión de la ley.
- Todo el que niega al Hijo no tiene al Padre; el que reconoce al Hijo tiene también al Padre.
- Pero de ti, Belén Efrata,
pequeña entre los clanes de Judá,
saldrá el que gobernará a Israel;
sus orígenes se remontan hasta la antigüedad,
hasta tiempos inmemoriales.