- En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.
- Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará en público.
- Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.
- Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
- Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
- Reconoce asimismo en tu corazón, que, como castiga el hombre a su hijo, así Jehová, tu Dios, te castiga.
- Si me conocierais, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora lo conocéis y lo habéis visto.
- Vosotros, pues, oraréis así:
“Padre nuestro que estás en los cielos,
santificado sea tu nombre.
Venga tu Reino.
Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.” - Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguien, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.
- Y yo rogaré al Padre y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre.
- Si alguno me sirve, sígame; y donde yo esté, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirve, mi Padre lo honrará.
- ¡Abba, Padre!, todas las cosas son posibles para ti. Aparta de mí esta copa; pero no se haga lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.
- Porque nada de lo que hay en el mundo —los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la vanagloria de la vida— proviene del Padre, sino del mundo.
- Pero si no perdonáis sus ofensas a los hombres, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
- Él nos ha librado del poder de las tinieblas y nos ha trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.
- Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre. El que confiesa al Hijo tiene también al Padre.
- Al vencedor le concederé que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono.
- En esto es glorificado mi Padre: en que llevéis mucho fruto y seáis así mis discípulos.
- Entonces Jesús les dijo otra vez:
—¡Paz a vosotros! Como me envió el Padre, así también yo os envío. - Salí del Padre y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo y regreso al Padre.
- Así como me envió el Padre viviente y yo vivo por el Padre, también el que me come vivirá por mí.
- No todo el que me dice: “¡Señor, Señor!”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
- El vencedor será vestido de vestiduras blancas, y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre y delante de sus ángeles.
- Lo que habéis oído desde el principio, permanezca en vosotros. Si lo que habéis oído desde el principio permanece en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre.
- Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas y os recordará todo lo que yo os he dicho.
Temas relacionados
Jesús
Entonces Jesús, mirándolos, dijo...
Amor
El amor es sufrido...
Mundo
No améis al mundo...
Recompensa
Y todo lo que...
Oración
Estad siempre gozosos. Orad...
Cielo
El Señor mismo, con...
Versículo de la Biblia del día
Uno hace diferencia entre día y día, mientras que otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente convencido de lo que piensa.Versículo de la Biblia al Azar
El que oculta sus pecados no prosperará,pero el que los confiesa y se aparta de ellos alcanzará misericordia.Siguiente versículo!Con imagen
