El que es paciente muestra gran discernimiento; el que es agresivo muestra mucha insensatez. | El que tarda en airarse es grande de entendimiento; Mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad. |
El amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor. | El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor. |
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Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración. | Gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración. |
Siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor. | Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. |
Pero, si esperamos lo que todavía no tenemos, en la espera mostramos nuestra constancia. | Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. |
No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos. | No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. |
Más vale ser paciente que valiente; más vale el dominio propio que conquistar ciudades. | Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad. |
Guarda silencio ante el Señor, y espera en él con paciencia; no te irrites ante el éxito de otros, de los que maquinan planes malvados. | Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. |
Pon tu esperanza en el Señor; ten valor, cobra ánimo; ¡pon tu esperanza en el Señor! | Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová. |
Ustedes quédense quietos, que el Señor presentará batalla por ustedes. | Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos. |
El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se arrepientan. | El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. |
Por lo tanto, como escogidos de Dios, santos y amados, revístanse de afecto entrañable y de bondad, humildad, amabilidad y paciencia. | Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia. |
Que el Dios que infunde aliento y perseverancia les conceda vivir juntos en armonía, conforme al ejemplo de Cristo Jesús. | Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús. |
Porque solo un instante dura su enojo, pero toda una vida su bondad. Si por la noche hay llanto, por la mañana habrá gritos de alegría. | Porque un momento será su ira, Pero su favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro, Y a la mañana vendrá la alegría. |
Por la mañana, Señor, escuchas mi clamor; por la mañana te presento mis ruegos, y quedo a la espera de tu respuesta. | Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré delante de ti, y esperaré. |
Por eso el Señor los espera, para tenerles piedad; por eso se levanta para mostrarles compasión. Porque el Señor es un Dios de justicia. ¡Dichosos todos los que en él esperan! | Por tanto, Jehová esperará para tener piedad de vosotros, y por tanto, será exaltado teniendo de vosotros misericordia; porque Jehová es Dios justo; bienaventurados todos los que confían en él. |
El Señor es clemente y compasivo, lento para la ira y grande en amor. | Misericordioso y clemente es Jehová; Lento para la ira, y grande en misericordia. |
Pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. | Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. |
Pero precisamente por eso Dios fue misericordioso conmigo, a fin de que en mí, el peor de los pecadores, pudiera Cristo Jesús mostrar su infinita bondad. Así llego a servir de ejemplo para los que, creyendo en él, recibirán la vida eterna. | Pero por esto fui recibido a misericordia, para que Jesucristo mostrase en mí el primero toda su clemencia, para ejemplo de los que habrían de creer en él para vida eterna. |
Pero no olviden, queridos hermanos, que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. | Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. |
Predica la Palabra; persiste en hacerlo, sea o no sea oportuno; corrige, reprende y anima con mucha paciencia, sin dejar de enseñar. | Que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. |
Por lo tanto, manténganse despiertos, porque no saben qué día vendrá su Señor. | Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. |
Vengo pronto. Aférrate a lo que tienes, para que nadie te quite la corona. | He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona. |
Rásguense el corazón y no las vestiduras. Vuélvanse al Señor su Dios, porque él es bondadoso y compasivo, lento para la ira y lleno de amor, cambia de parecer y no castiga. | Rasgad vuestro corazón, y no vuestros vestidos, y convertíos a Jehová vuestro Dios; porque misericordioso es y clemente, tardo para la ira y grande en misericordia, y que se duele del castigo. |
El futuro de los justos es halagüeño; la esperanza de los malvados se desvanece. | La esperanza de los justos es alegría; Mas la esperanza de los impíos perecerá. |