- Rásguense el corazón
y no las vestiduras.
Vuélvanse al Señor su Dios,
porque él es misericordioso y compasivo,
lento para la ira y lleno de amor,
cambia de parecer y no castiga. - «Ahora bien», afirma el Señor,
«vuélvanse a mí de todo corazón,
con ayuno, llantos y lamentos». - La vid se secó
y la higuera se marchitó;
el granado, la palmera, el manzano
y todos los árboles del campo se secaron.
Y hasta la alegría de la gente
se marchitó.
Versículo de la Biblia del día
Toda palabra de Dios es purificada;Dios es escudo a los que en él buscan refugio.