- El comienzo de la sabiduría es el temor del Señor;
conocer al Santo es tener discernimiento. - Este es el mensaje que hemos oído de él y que les anunciamos: Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad.
- Ciertamente les aseguro que ningún siervo es más que su amo, y ningún mensajero es más que el que lo envió.
- Porque toda casa tiene su constructor, pero el constructor de todo es Dios.
- Más bien, al vivir la verdad con amor, creceremos hasta ser en todo como aquel que es la cabeza, es decir, Cristo.
- El Señor es mi luz y mi salvación;
¿a quién temeré?
El Señor es el baluarte de mi vida;
¿quién podrá amedrentarme? - ¡Alaben al Señor porque él es bueno,
y su gran amor perdura para siempre! - Esposas, sométanse a sus propios esposos como al Señor. Porque el esposo es cabeza de su esposa, así como Cristo es cabeza y Salvador de la iglesia, la cual es su cuerpo.
- Porque la paga del pecado es muerte, mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor.
- La suma de tus palabras es la verdad;
tus rectos juicios permanecen para siempre. - El hijo sabio es la alegría de su padre;
el hijo necio es el pesar de su madre. - Es muy grato dar la respuesta adecuada,
y más grato aún cuando es oportuna. - La ley del Señor es perfecta:
infunde nuevo aliento.
El mandato del Señor es digno de confianza:
da sabiduría al sencillo. - Toda palabra de Dios es digna de crédito;
Dios protege a los que en él buscan refugio. - El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor.
- Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos.
- Plata refinada es la lengua del justo;
el corazón del malvado no vale nada. - El que los llama es fiel, y así lo hará.
- Esto es lo que he comprobado: que en esta vida lo mejor es comer y beber, y disfrutar del fruto de nuestros afanes. Es lo que Dios nos ha concedido; es lo que nos ha tocado.
- Bueno es el Señor;
es refugio en el día de la angustia,
y protector de los que en él confían. - Sean compasivos, así como su Padre es compasivo.
- El que es paciente muestra gran discernimiento;
el que es agresivo muestra mucha insensatez. - Pero yo les digo: No juren de ningún modo: ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey.
- Es mejor refugiarse en el Señor
que confiar en el hombre. - Dios es espíritu, y quienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.
Versículo de la Biblia del día
¿Quién es este Rey de la gloria?Es el Señor Todopoderoso;
¡él es el Rey de la gloria! Selah